Los tres fundadores del Sónar, Enric Palau, Ricard Robles y Sergio Caballero, se han desvinculado totalmente del festival, según ha adelantado La Vanguardia y ha confirmado la ACN. El festival cuenta ahora con un nuevo CEO, el fundador y máximo responsable del Brunch Elektronic, el belga François Jozic.
Los tres fundadores del Sónar vendieron la mayoría de acciones en 2018 a la promotora Superstruct Entertainment, pero habían mantenido hasta ahora la dirección del evento. Ahora, se desvinculan del festival 32 años después de su creación.
La relación de Superstruct con KKR
Superstruct, fundada en 2017 por James Barton, antiguo director de música electrónica de Live Nation, ocupó varios titulares el año pasado después de que el fondo de inversión KKR —señalado por su proximidad con Israel— comprara la promotora al fondo Providence Equity Partners por una cifra aproximada de 1.300 millones de euros.
Esta operación generó una fuerte polémica, especialmente durante la última edición del Sónar de Barcelona, festival integrado dentro del conglomerado de Superstruct. Varios colectivos y artistas acusaron al festival de connivencia con el genocidio israelí, una crítica que también se extendió a otros eventos organizados por la misma empresa, como el Viña Rock, el Resurrection Fest, el Arenal Sound o el FIB de Benicàssim. El boicot al Sónar fue especialmente intenso: más de treinta artistas cancelaron sus actuaciones, mientras que otros aprovecharon su paso por los escenarios para denunciar la guerra en Gaza y cuestionar públicamente la vinculación del festival con su nuevo propietario.
Ante esta situación, fuentes de Superstruct quisieron transmitir un mensaje de calma, destacando que Ricard Robles, Enric Palau y Sergi Caballero, los tres fundadores del Sónar, “dejan un legado extraordinario que será respetado”. La empresa ha insistido en que “la esencia del Sónar no cambiará”, ya que la transición de dirección había sido pactada desde la compra y se considera un relevo generacional natural.
El proyecto original del festival se remonta a los años noventa, cuando Palau y Caballero, miembros del colectivo Los Rinos, colaboraron con el periodista Robles después de participar en la producción musical del pabellón de España en la Expo’92 de Sevilla. El primer Sónar tuvo lugar en 1994, con un presupuesto modesto de 25 millones de pesetas y 6.000 asistentes en los espacios del MACBA y el CCCB.
El festival debe resolver algunas incógnitas de cara a la próxima edición, en la que abrirá una nueva etapa. El evento, que tendrá lugar los días 18, 19 y 20 de junio, se celebrará en un espacio único, en la Fira Gran Via L’Hospitalet de Llobregat, con una propuesta que integrará todos los shows y actividades de Sónar de Día, Sónar de Noche y Sónar+D por las obras en el recinto de Montjuïc, donde tradicionalmente se desarrollaban las actividades diurnas.