Aquisgrán (capital del Imperio carolingio), 11 de septiembre de 878. Hace 1.147 años. El rey Luis II, llamado el Tartamudo, bisnieto del emperador Carlomagno y tercer rey de Francia, nombraba a Wifredo nuevo conde de Barcelona. Wifredo, que durante su existencia muy probablemente ya sería conocido con el patronímico "Pilosus" (el Velloso), ya era conde —es decir, delegado territorial del poder central— en los condados de Urgel, de la Cerdaña, del Conflent y de Osona, y con aquel nombramiento se convertía en el funcionario real más poderoso de la Marca de Gotia, la región más meridional del reino francés. ¿Quién era Wifredo y por qué la cancillería real francesa lo "premió" con aquella acumulación de cargos? ¿Qué relación tenía Wifredo con la cancillería real? ¿Es cierto que era descendiente del emperador Carlomagno y, por lo tanto, pariente del rey Luis II?

¿De dónde venía Wifredo?
El origen genealógico de Wifredo sigue rodeado de polémica. Una parte de la historiografía sostiene que era hijo del conde Sunifredo I de Urgell, un terrateniente "indígena" originario de la Ceretania —la actual Cerdaña— que habría facilitado el tránsito de poder de ese territorio —de los árabes a los francos (785)—. Y otra parte sostiene que era nieto del conde Bellón de Carcasona, un terrateniente descendiente del monumental exilio de la Tarraconense y de la Narbonense hacia el reino de los francos, que se produjo durante la invasión árabe (714-723). No obstante, tanto Sunifredo como Bellón formaban parte de un mismo corpus social: el de las viejas oligarquías visigóticas del extremo norte de ese dominio —las actuales Cataluña y Languedoc—, que se habían exiliado. Por lo tanto, Wifredo era un producto de aquel fenómeno.

¿Por qué Wifredo acumuló tantos cargos?
La respuesta a esta pregunta la debemos buscar medio siglo antes, en el transcurso de unos hechos trascendentales que marcarían el futuro de aquellos primigenios condados catalanes (o, mejor dicho, precatalanes). En el año 826 había estallado la revuelta de Aizón, la primera guerra civil de la historia de Catalunya, que enfrentaría a los condes de origen "indígena" (partidarios de cultivar la paz con el califato andalusí) y los condes de origen "palatino" (los segundones de las familias oligárquicas de la corte, que estimulaban la guerra con el califato para ganar honores y beneficios). Aquel conflicto se saldó con la victoria de los segundones “palatinos” (827), y muchas familias oligárquicas "indígenas" quedaron marginadas del poder. Excepto la familia de Wifredo (abuelos y padres), que, a pesar de ser "indígenas", habrían combatido junto a los segundones "palatinos".
Muy probablemente, la tradición de las "cuatro barras de sangre" (un leal Wifredo combatiendo hasta la muerte y el escudo con la marca de los dedos, que simboliza el reconocimiento de Luis II) intenta explicar esta estrecha relación entre la familia de Wifredo y la cancillería real (partidario de los segundones "palatinos" en la guerra civil precatalana). Y esta sería la causa que explicaría que, transcurrido medio siglo, Wifredo tuviera esta significativa acumulación de cargos. Entre el año 878 (cuando completa la acumulación de cargos condales) y el año 897 (año de su muerte), Wifredo fue "el hombre de Aquisgrán" en la Marca de Gotia, lo que no le impediría añadirse a la inercia general feudal (usurpación de bienes públicos, como el ejército, la hacienda o la justicia) y convertirse en el primer conde catalán —dependiente del poder central— que transmitía su cargo por herencia.

El matrimonio de Wifredo
Y esta estrecha relación se vería recompensada con un matrimonio político, que lo confirmaría, plenamente, en su posición de conde más poderoso de la Marca de Gotia. En el año 877 (con 37 años, una edad avanzadísima en aquella época) se casaba con Guinidilda (de edad desconocida). También con Guinidilda sucede lo mismo que con Wifredo. Una parte de la investigación historiográfica sostiene que es hija del conde Borrell I de Cerdanya —un oligarca "indígena", primo hermano del padre de Wifredo. Pero, en cambio, otra parte sostiene que sería hija de Robert "Brazo de Hierro" y de... Judit de Flandes, ...¡¡¡nieta del emperador Carlomagno!!! Según esta misma parte de la investigación, Robert y Judit —los padres de Guinidilda y los suegros de Wifredo— eran condes carolingios de Flandes y habían vivido una curiosa historia de amor, con secuestro incluido.
La hipótesis del origen real de Guinidilda no ha sido plenamente confirmada, pero hay un dato que, por significativo, resulta muy revelador: Guinidilda fue, automáticamente, asociada al poder condal. Tras la boda (877), la inmensa mayoría de los documentos de la modesta cancillería condal barcelonesa, los firman los dos. Y este detalle, en una sociedad de marcada cultura patriarcal como la de esa época, tiene mucha importancia. Wifredo y Guinidilda engendrarían diez hijos. Cinco chicos (Wifredo, Miró, Sunifredo, Radulfo y Suniario) y cinco chicas (Emma, Ermesenda —no es la de Carcasona—, Cixilona, Riquilda y Guinidilda, como la madre). Entre esta descendencia encontramos tres nombres que son habituales en la corte de Aquisgrán (Radulfo, Riquilda y Guinidilda). Y si bien este detalle no confirma nada, sí que resulta bastante significativo.

¿Era Wifredo descendiente de Carlomagno?
Wifredo no era descendiente de Carlomagno. En cambio, su esposa Guinidilda muy probablemente lo sería. Y considerando que Wifredo sería el primer conde de la Marca de Gotia que transmitiría hereditariamente su cargo, todos los condes dependientes (897-987) y los condes independientes —y reyes de Aragón, València, Sicilia y Cerdeña— (987-1410) que lo sucedieron serían descendientes de Carlomagno. Serían una rama menor de la familia imperial carolingia. Y esta condición habría podido tener un gran peso cuando, con la muerte de Luis V (987) —el último rey del linaje carolingio de Francia—, Borrell II de Barcelona (nieto de Wifredo y de Guinidilda), por diversos motivos, y uno de ellos la coronación de un miembro de otra rama menor, se negaría a renovar el pacto de vasallaje al nuevo monarca Hugo Capeto, precipitando la primera independencia nacional catalana (987).