Las canciones de Carlos Sadness desprenden un buen rollo natural. Escucharlo es algo así como estar dentro de un anuncio de Estrella Damm de forma permanente; su música es una mezcla de poesía y melodías simpáticas que ya cuenta con casi dos millones de oyentes mensuales en Spotify. Y es que el cantante barcelonés es un fenómeno de masas en Latinoamérica, donde él y su ukelele lo han roto todo. Cabeza de cartel de múltiples festivales y plenamente consolidado en la escena más indie del país, ya tiene 4 álbumes de estudio en el mercado y en el último, Tropical Jesus (2020), ha contado con las colaboraciones de artistas como Bomba Estéreo o Sebastian Pringle, líder vocalista de Crystal Fighters. Pero, pese a tanto ajetreo, a Carlos Sadness parece que nunca se le acaben las pilas. Esta noche toca en el Som de Mar Festival de Lloret de Mar.
Llegarás a Lloret recién aterrizado de México. Serás el primer artista español en actuar ahí tras la pandemia. ¿Cómo te los imaginas, estos conciertos?
¡Vengo de allí! Ha estado muy emocionante volver a México antes de lo previsto. Han contado con nosotros como si fuéramos locales y hemos sentido un amor muy bonito que nos ha llenado de esperanzas y de ganas de volver a recorrer Latinoamérica.
¿Cómo vives los conciertos desde el estallido de la pandemia?
Agradecido de poder hacerlos; ya no me importa tanto eso de tener a la gente sentada, hemos aprendido a saborearlos. Me gusta pensar que es un lugar seguro dónde seguir disfrutando, siento que son liberadores.
Carlos Sadness actúa hoy en el Som de Mar Festival de Lloret de Mar.
¿Cuál es el concierto más especial que has dado nunca?
Es difícil, son momentos diferentes en la vida. El primero en el Apolo de Barcelona fue muy especial, pero también la llegada a México o en el Wizink en Madrid. O Razzmatazz; o la segunda vez en Lima que estaba a reventar, llevando semanas lejos de casa, cuando me llamó la manager para decirme que había ganado el Grammy minutos antes de salir a tocar.
Publicaste Tropical Jesus justo ahora hace un año. ¿Ha tenido, para las circunstancias que hemos vivido, la vida y el recorrido que debería haber tenido?
Ha habido menos conciertos y, en los que ha habido, se ha bailado poco. Pero estoy feliz por haberlo sacado y por haber acompañado musicalmente este tiempo. En stream, ha sido brutal la acogida: tiene un año y unos 90 millones de reproducciones, sin sonar prácticamente en la radio ni tocar en festivales. Nunca había conseguido números tan locos.
¿Más allá de producirle el disco, como surgió la colaboración con Suu en su tema Barcelona Tropical?
Lo teníamos pendiente, pero no quería estar tan presente en el disco. Estaba claro que tenía que pasar, aunque quizás no tanto que fuera en catalán.
Es la primera vez que cantas en catalán. ¿Te ves experimentando más en este idioma?
Ya había compuesto en catalán, y tenía ganas de sacar alguna cosa. Seguramente no sea la última vez que lo haga. Aunque la gran mayoría de mi público no entiende perfectamente el catalán, oigo que la canción les ha gustado y muchos se han esforzado por saber de qué hablaba.
Sadness: "Nunca había conseguido números tan locos como con Tropical Jesus""
¿En qué proyectos estás trabajando actualmente? ¿Hay disco nuevo en el horizonte? ¿Y como productor?
He estado pendiente de mi vida a un nivel más personal y he escrito poco, pero tengo ganas de seguir haciendo canciones cuando la gira se calme un poco. A veces me escriben para producir canciones, pero la vida no me da la vida por lo tanto; mi carrera ocupa muchas horas y las que quedan las necesito para estar con los pies en el suelo.
¿Y como fan de la música? ¿A qué artistas estás escuchando últimamente? ¿Qué es lo último que te ha hecho estallar la cabeza?
Me han gustado el nuevo disco de Oques Grasses y el EP de Marc Mars.
¿Qué hace Carlos Sadness cuando no compone ni produce? El diseño y la ilustración son tu otra gran pasión, ¿no?
Me gustan muchas cosas creativas. Este año me he tomado seriamente la arquitectura y el interiorismo para dar forma a mi casa, y lo he disfrutado. Me encanta viajar, pero ahora es un poco más complicado; he viajado más por Catalunya y Aragón, he conectado con el Mediterráneo después de tanto viaje tropical. Y de aquí ha salido La Costa Breve.
¿Qué otras cosas te inspiran? ¿Te ves probando en otras disciplinas creativas?
El problema es el tiempo, no hay tiempo para hacer todo lo que me gustaría o para dedicarlo a ser bueno en todo lo que me gustaría, aprendiendo, equivocándome... Además, hay que vivir; si no, no sabría de qué hablar y me tomo muy seriamente esto de vivir.
¿Te gustan el cine y la literatura? ¿Qué es lo último que has visto/leído?
Hace tiempo que no veo series y no recuerdo una película reciente que me haya enamorado. Jojo Rabit es antigua ya, ¿no? Hace poco leí un libro que se llama Mariquita, de Juanito Libritos, que es sencillo pero que me hizo llorar y sonreír.
¿Qué sueños te faltan para cumplir? Y no hablo exclusivamente del mundo de la música.
No lo sé, nunca he perseguido metas. Disfruto de las cosas bonitas que llegan.