Seguramente, uno de los misterios más atractivos de los vinos de Alella es su propia existencia. En pleno Maresme, producto de unas pequeñas viñas que a veces, quedan escondidas de la mirada curiosa de los visitantes y que, desde hace muchos años, luchan por su supervivencia en una admirable y desigual batalla contra la expansión de los núcleos urbanos que lo rodean. Los vinos de Alella tienen una larga historia y una importante significación dentro de la vinicultura catalana.

La DO Alella resiste entre el mar y la montaña al asedio que supone el crecimiento urbano de Barcelona y sus ciudades limítrofes

DON ALELLA VISTAS

Una de las espectaculares vistas que ofrece la DON Alella.

¿Cómo son las viñas de esta DO?

Las viñas de la DO Alella se encuentran en ambos lados de la sierra litoral, dándose la espalda, ya que unas miran hacia el mar Mediterráneo y las otras medio escondidas entre los bosques de la vertiente sombría, al oeste, hacia el Vallès Oriental. La DO Alella mantiene la antigua tradición del cultivo en la zona, aprovechando las pendientes y las llanuras, las solanas y los sombríos, en que se obtienen los mostos óptimos para elaborar unos vinos frescos y con carácter marcadamente mediterráneo.

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Las viñas de la DO Alella junto al mar.

En los últimos años se han adaptado a formas de cultivo que permiten una mayor sostenibilidad de las empresas vitivinícolas, manteniendo la singularidad que les da el clima, la tierra y el trabajo de una viticultura de larga tradición que se remonta al siglo VI a.C. y que ha sabido adaptarse a esta singular zona.

La pasa blanca, la joya de la corona

El carácter fresco y singular de los vinos de Alella se consigue con variedades tradicionales como la Pasa blanca (la más característica de la DO), la Garnacha blanca, el moscatel y la Garnacha negra.

DON ALELLA variedades recomendadasPara complementar y enriquecer la diversidad de los vinos de la DO Alella, a lo largo de los años se han plantado las variedades Chardonnay, Macabeo, Malvasía, Chenin, Moscatel del grano menudo, Parellada, picapoll blanco y Sauvignon blanco en caso de variedades blancas y Cabernet sauvignon, Garnacha peluda, Merlot, Monastrell, Pinot noir y Cariñena en el caso de las negras.

DON ALELLA blancas autorizadas

DON ALELLA variedades negras autorizadas

La mineralidad, una característica muy preciada

El denominador común de los vinos de esta DO es la mineralidad, sobre todo en los vinos blancos, sea cual sea el método de elaboración. Esta característica se encuentra tanto en los vinos blancos y negros de la vertiente marítima, en la comarca del Maresme, y una pizca menos perceptible en la vertiente de interior, en la comarca del Vallès Oriental.

¿De dónde proviene esta mineralidad? Del tipo de suelo. Este subsuelo granítico en la superficie se transforma en pequeños granos, los cuales se denominan 'sablón'. Una tierra con una buena permeabilidad hace necesario que la cepa profundice sus raíces para buscar el agua y los diferentes alimentos que le aporta el terruño. Así, crea un pequeño "estrés", que bien controlado ayuda también a regular la producción de uva. De hecho, la pequeña diferencia gustativa que podemos apreciar en los vinos elaborados en la vertiente marítima respecto de los elaborados en la vertiente interior, es que los vinos de interior tienen la acidez más presente.

Pasea por la tierra de la pasa blanca

La mejor manera para conocer esta DO es visitar los municipios y bodegas que la conforman. Entre los 31 municipios y las nueve bodegas que hay en la zona seguro de que encontrarás una ruta o una visita que se adapte a tu gusto. ¡A continuación, te proponemos un par!

Ruta 1: Enoturismo por el Baix Maresme (Tiana - Montgat)

Os proponemos una ruta turística para pasar un día inolvidable, una fusión de patrimonio y gastronomía casados con los excelentes vinos de la DO de Alella.

La primera parada de esta ruta la encontramos en la pequeña y familiar Bodega Joaquim Alcalde de Tiana. De hecho, con 14.000 botellas anuales, es uno de los más pequeños a la vez que emblemático de la DO Alella. Nace en 1999, fruto de años de tradición familiar cultivando la viña. Siguiendo los pasos de su padre, el propietario y autor de los vinos Foranell y Coriolis, Joaquim Batlle, consigue plasmar los sabores tradicionales de las variedades autóctonas de la DO Alella: pasa blanca, garnacha blanca y picapoll, aportando modernidad y expresión y creando unos vinos ecológicos de gran calidad y personalidad propia. Los vinos blancos de Quim Batlle son de un mérito enológico extraordinario, ya que son vinos blancos de crianza, con añadas en el mercado de tres y cuatro años atrás.

¿Nuestra recomendación? La cata de tres vinos maridada con embutidos de proximidad. Precio medio: 20€ por persona. Visita mínima de dos personas. Reserva previa a los teléfonos 93 395 45 27 o 648 18 00 35 o por correo electrónico en celler@joaquimbatlle.com.

Bajando desde la Bodega Quim Batlle, os encontraréis la pequeña Ermita de la Alegría, un lugar digno para hacer una parada en el camino. La ermita constituye una de las construcciones más antiguas que se conservan en el municipio de Tiana. A su belleza se añade su historia, que no os dejará indiferentes.

Parroquia vieja o de la Alegría (Tiana) 005

La Ermita de la Alegría de Tiana

Continuando el recorrido llegaréis a la Iglesia de Sant Cebrià, que se alza majestuosa en la parte más elevada del centro del municipio de Tiana. Podéis seguir disfrutando de las calles estrechas, saboreando la calma y la vida tranquila de esta villa, para muchos desconocida o llegar hasta Montgat, donde después continuaréis la ruta.

Después de una comida casada con los vinos de la DO Alella (encontraréis buenas opciones tanto en Tiana como en Montgat) os recomendamos finalizar el recorrido con un paseo cerca del mar para seguir saboreando estos toques salinos que reflejan los vinos de la tierra.

Ruta 2: Enoturismo en Alella

Alella es la capital del vino de la DO Alella. Es aquí donde el año 1906 nació la primera sociedad cooperativa agrícola, la actual Alella Vinícola, que arrancó la actividad con medio millón de cepas. En el municipio de Alella encontramos cuatro bodegas (Alella Vinícola, Alta Alella, Bouquet d'Alella i Roura, así como algún viticultor de renombre como Albert Federico). Tres de estos, aparte de dedicarse a la producción de vino, se dedican también al enoturismo, cada vez con más relevancia, originalidad y profesionalización. A continuación os explicamos cuáles son y qué hacen.

Alella Vinícola es una bodega familiar creada en 1906 en el corazón de la DO Alella, a solo 15 kilómetros de Barcelona. Elaboran unas 90.000 botellas anuales de una docena de vinos y además, también hacen diferentes actividades relacionadas con el mundo del vino y la gastronomía. Disponen de restaurante propio a la misma bodega modernista diseñada por Jeroni Martorell, discípulo de Antoni Gaudí.

Os recomendamos la visita por las viñas con cata de tres vinos a la Bodega Modernista. Precio medio: 18€ o la visita a la bodega con cata de tres vinos 12€.

La segunda parada es la Bodega Alta Alella Mirgin o Celler de las aves, un proyecto familiar que nació al principio de los años 90 y que ha llegado a su madurez con una propuesta inigualable de enoturismo. La bodega cuenta con un centro de recepción de visitas para que los amantes del vino y el cava puedan degustar todos los productos mientras disfrutan de unas magníficas vistas del mar Mediterráneo en un entorno vitícola singular. 

Os recomendamos la visita a la viña y la bodega con cata de cuatro vinos. Precio 20 € o una de sus visitas particulares con un maridaje de jamón o de productos de la tierra.

Por último, el Bouquet d'Alella, que juega con el nombre de la finca familiar (Can Boquet) y el término bouquet (la palabra francesa que designa los aromas que desprende el vino) apuesta para impulsar, por una parte, la producción y venta de vinos ecológicos de calidad y, por la otra, la promoción de sus experiencias vitivinícolas con una apuesta firme por el enoturismo a tan solo 15 kilómetros de Barcelona.

Es una de las bodegas que más alternativas de enoturismo ofrecen: pícnic entre viñas, aperitivo entre viñas, cenas de luna llena y muchas más experiencias. Os animamos a descubrirlas. Os recomendamos la visita con pícnic entre viñas. ¡Disfrutaréis de un entorno natural inmejorable!

¿Con todas estas opciones, en qué esperáis para visitar la DO Alella? ¡Disfrutarás de unos vinos excelentes en un entorno natural único!

 

Con la colaboración de:

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