El sector del taxi, en medio del conflicto con la conselleria de Territori por la regulación de las VTC, ha anunciado que se sumará a la huelga de médicos y profesores del 25 de enero con un paro de cuatro horas de taxis en la Gran Via de Barcelona, que quedará de esta manera cortada al tráfico. El portavoz d'Èlite Taxi -una de las entidades convocantes del paro-, Tito Álvarez, ha señalado este viernes por la mañana que se suman así a la huelga convocada en los sectores de sanidad y enseñanza y que los vehículos quedarán aparcados, ocupando "todos los carriles de la Gran Vía" entre las 10 y las 14 horas.

El mismo Álvarez, que ha comparecido esta mañana acompañado de Luis Berbel, presidente del Sindicat del Taxi de Catalunya (STAC), no ha descartado que el paro se convierta en una ocupación indefinida de la Gran Via, como ya pasó en el verano de 2018, y por eso ha hablado de "paro preventivo" después de alejar posiciones con la conselleria de Territori para evitar la huelga durante la feria del sector audiovisual Integrated Systems Europe (ISE), que se celebrará en el espacio ferial de l'Hospitalet de Llobregat entre el 31 de enero y el 3 de febrero, y todavía ha ido un poco más lejos, alertando de que se puede convocar huelga para los días de celebración del Mobile World Congress (MWC), entre el 27 de febrero y el 2 de marzo.

"Es el último aviso", ha señalado Álvarez, que ha presionado así al Govern pidiéndole que incluya a la ley de Acompañamiento de los Presupuestos -todavía pendientes de aprobación- las principales reivindicaciones del sector, que incluyen la persecución policial de las VTC que operan sin licencia o que las plataformas no puedan variar las tarifas reguladas ni ofrecer descuentos. En este sentido, Álvarez ha señalado que desde la marcha lenta del martes pasado "se han movido cosas" y "todas malas". "No pensábamos encontrarnos, por ejemplo, con 1.170 autorizaciones VTC que un funcionario ha sacado de un cajón", ha criticado, al tiempo que ha añadido que es un dato que las asociaciones siempre han preguntado al Govern y han acabado sabiendo por los medios de comunicación.

Con todo, Álvarez ha asegurado que la mitad de las licencias que han surgido ahora con un año de vigencia –los cuatro años de moratoria los empezaron a contar desde 2019 y ya han vencido- corresponden a las VTC tradicionales y ha augurado que en julio ya quedarán pocas de las que trabajan para las plataformas porque habrán ido caducando. Además de esta movilización del 25 de enero, se mantiene la huelga prevista para los días 31 de enero a 3 de febrero.