Con la mayoría de encuestas situando la candidatura de Esquerra Republicana en la cuarta posición en las elecciones municipales del 28 de mayo en Barcelona, la número 2 de la lista de Ernest Maragall, Elisenda Alamany ha asegurado que a estas alturas, a pesar del llamado "efecto Trias", por la irrupción del exalcalde como candidato de Junts, el rival de los republicanos es el PSC de Jaume Collboni. Según ha defendido Alamany, en las dos anteriores elecciones, el 2015 y el 2019, los barceloneses votaron un cambio en la ciudad, demostrando que "no querían ni a Trias ni a Colau", mientras su partido ganó los últimos comicios. Aunque también ha criticado la gestión de los comunes al frente de la alcaldía durante estos ocho años, asegurando que se han quedado atrapados en posiciones sectarias y evitando poner el foco en los temas que preocupan a la ciudadanía, como son la limpieza y la seguridad, se ha fijado en el caso de Xavier Trias, asegurando que el exalcalde de Barcelona "lleva propuestas para una ciudad que no existe". Además, ha considerado que no se presenta a las elecciones municipales para salvar la capital catalana o poner la ciudad en el centro, sino para "salvar a Convergència". "Él no tenía nada de interés en concurrir a las elecciones y después cambió de opinión, pero no fue por él, sino por los otros", ha reflexionado la republicana sobre la decisión de Trias en una entrevista al programa Café de Ideas de La 2.

Candidatos a las elecciones municipales 2023 en Barcelona: toda la lista

Además, Alamany ha asegurado también que el candidato, que ahora lidera buena parte de las encuestas junto con Jaume Collboni y por delante de Ada Colau, "representa parte del independentista que muchas veces, se ha quedado con la cosa más abstracta", mientras ha reclamado un independentismo "útil y que trabaje para la gente". En este sentido, se ha referido también a las palabras de la portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, a quien le ha reprochado un "discurso duro y desconectado", asegurando que sus declaraciones hacen referencia a un momento del movimiento que la población ya ha superado, hablando del "lo volveremos a hacer", las efemérides o las fechas clave: "Hemos pasado de un proyecto ilusionante a decir únicamente que Junts y ERC tienen que ir del brazo para un proyecto conjunto. Esto no seduce y no representa el 80% que ERC quiere representar". La número 2 de ERC en Barcelona ha lamentado también que el procés ha manoseado el significado de ser independentista: "Lo ha hecho feo", ha concluido.

Los proyectos de Trias y Collboni, muy similares según Alamany

Volviendo a las elecciones municipales del próximo 28 de mayo, Alamany ha asegurado que la propuesta de Trias y Jaume Collboni son muy cercanas, ya que hacen referencia a "un modelo de ciudad atenta en aquello que le llega de fuera", mientras se ha preguntado por qué Barcelona no se puede construir según sus propios valores. La exportavoz de los comunes en el Parlament ha puesto como ejemplo la calle Ferran, que lleva a las dos instituciones más importantes del país, según ella, en referencia al Ajuntament y el Palau de la Generalitat, que durante la época de la pandemia estuvo desierta y con las persianas bajadas porque mira al turismo y no a los vecinos. "Yo quiero Ramblas del Poblenou, donde los comerciantes subieron la persiana porque creían que tenían que contribuir a una ciudad llena de vida".

Ante los resultados más que ajustados que prevén las encuestas y la necesidad de pactos para encabezar el consistorio barcelonés, Alamany no ha aclarado con quien está más dispuesta a pactar ERC, si con los comuns de Ada Colau o con Trias, pero ha asegurado que se siente alejada de las posiciones que quieren una "Barcelona saturada por aquellos que vengan de fuera", en referencia a las propuestas de Junts. "Estoy lejos de los que no piensan en aquellos que se marchan de la ciudad porque es insostenible vivir. Estoy lejos de aquellos que no critican que haya familias jóvenes que se marchan, porque tienen que destinar los ingresos al alquiler, por la contaminación, por la falta de jardines de infancia. Yo no quiero una Barcelona que me expulse", ha insistido. Con todo, durante la entrevista, también ha criticado la gestión de Colau, aunque ERC ha dado apoyo en buena parte de sus iniciativas, asegurando que, a pesar de sus buenas intenciones, "ha cerrado la ciudad" y esta ha dejado de brillar.