¿El Eixample reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO? Esta es la petición que ha hecho la asociación Salvem Barcelona, la misma que ha denunciado el Ayuntamiento de Barcelona por un presunto delito contra la ordenación del territorio por el proyecto de los Eixos Verds, la supermanzana que el gobierno Colau quiere implantar en cuatro calles del Eixample, y que el martes mismo recibió una dura crítica por parte de la Sindicatura de Greuges de Barcelona por su tramitación irregular. Según ha adelantado 'La Vanguardia' este miércoles, la entidad ya ha dado los primeros pasos para conseguir este reconocimiento a nivel mundial.

De momento, Salvem Barcelona ha enviado dos cartas, una al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y otra al ministro de Cultura, Miquel Iceta, pidiéndoles que promuevan la candidatura del Eixample como Patrimonio de la Humanidad. Según el mencionado medio sólo se habrían dirigido estas dos peticiones, por lo cual resulta notorio que no se haya hecho la misma petición a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ni a ningún representante del consistorio. En todo caso, los solicitantes consideran que el Eixample desarrollado por Ildefons Cerdà reúne todas las condiciones para que la Generalitat y el Estado avalen la candidatura, añadiendo un llamamiento a la ciudadanía para impulsar la iniciativa.

La petición citada por 'La Vanguardia' hace referencia al "conjunto urbanístico y arquitectónico que representa el Eixample de Barcelona, testimonio emblemático del carácter de la ciudad" y establece un paralelismo con el Plan Haussmann que reurbanizó y modernizó París en el siglo XIX como lo hizo Cerdà en Barcelona. También se recuerda que en el Eixample hay edificios que ya forman parte del Patrimonio de la Humanidad, como la Sagrada Familia, la Pedrera y la Casa Batlló, las tres de Gaudí, además de otras obras de los arquitectos Lluís Domènech i Montaner i Josep Puig i Cadafalch.

Salvem Barcelona es una entidad liderada por los economistas Jacint Soler Padró y Francec Granell que hace unas semanas presentó denuncia en la fiscalía contra el gobierno municipal de la capital catalana por un presunto delito contra la ordenación del territorio por la manera como se tramitaron, aprobaron y licitaron las obras para convertir cuatro calles del Eixample en ejes verdes. La fiscalía ya investiga la tramitación de los ejes verdes previstos en las calles Consell de Cent, Rocafort, Comte Borrell y Girona y la creación de cuatro plazas, todas ellas dentro del proyecto Eixos Verds del Eixample.

La investigación podría llegar a alterar los planes del ayuntamiento para este proyecto, uno de los más importantes dentro de la implantación del Model Superilla Barcelona que supondrán, si se llevan a cabo, la consolidación de las calles pacificadas con actuaciones de urbanismo táctico durante la pandemia con la excusa de ganar más espacio a la ciudadanía. En todo caso, la intención del consistorio es empezar a trabajar en el mes de junio, con una duración prevista de ocho meses, de manera que la transformación entera estaría terminada a principios del 2023. De hecho, será una más de las obras que tendrán plazos de finalización poco antes de las elecciones municipales previstas en mayo del 2023, como la anunciada reforma de la Via Laietana, cuya primera fase tendría que estar terminada hacia abril del 2023.