La actual diputada de la CUP en el Parlament, Basha Changuerra, ya es la candidata oficial de los anticapitalistas a la alcaldía de Barcelona, después de que haya sido escogida este domingo por la noche en asamblea y proclamada este lunes en un acto público en el Centro Cultural La Farinera del Clot. En los últimos días, Changue ya se había posicionado como apuesta favorita del partido para poder volver al Ayuntamiento de Barcelona, una institución de la que quedaron en las últimas elecciones municipales del 2019. En su discurso ha defendido un nuevo modelo de ciudad basado en el decrecimiento del turismo.

Vecina de Nou Barris, de treinta y siete años e hija de la inmigración: tiene ascendencia guineana y cordobesa. Desde hace tres años combina el activismo con una trayectoria política institucional intensa. De hecho, ya fue concejala en el Ayuntamiento de Moià, ciudad donde vivió durante una década, entre 2019 y 2021 por la candidatura local de la CUP. Dejó este cargo cuando entró como diputada en el Parlament de Catalunya. En paralelo, impulsó la organización cooperativa afrofeminista AfroFem Koop y también es miembro de la Comunidad Negra, Africana y Afrodescendente de Catalunya (CNAACAT). En la cámara catalana centra su actividad en cuestiones de racismo institucional e igualdad de género. Ha liderado iniciativas como la reforma de la ley contra la LGTBIfobia para prohibir las "terapias" que pretenden convertir en heterosexuales a las personas del colectivo. Los anticapitalistas quieren aprovechar su proyección como diputada.

La candidata ha sido presentada oficialmente este lunes y ha dado por hecho que la CUP volverá al Ayuntamiento de Barcelona. "La CUP vuelve porque hay que frenar el continuismo de las políticas de la marca Barcelona, que ha expulsado a las vecinas de la ciudad, y el viraje hacia la derecha del pleno municipal", ha asegurado Basha Changue. Ha denunciado la situación actual, con veinte desahucios al día y un precio del alquiler medio de 1.000 euros. Frente a esto, ha apostado por "construir un nuevo modelo de ciudad enfocado en el decrecimiento del turismo" y una planificación que diversifique la economía de la capital catalana. "Volvemos porque queremos construir un modelo de ciudad donde las que trabajan puedan vivir y las que viven allí puedan disfrutar", ha concluido.

En la asamblea de este domingo, Changue ha sido la escogida entre una lista de quince candidatos propuestos por los diferentes núcleos y organizaciones de la CUP a la capital catalana. La actual diputada era la candidata del núcleo de Nou Barris, barrio donde ha crecido hasta que tuvo que marcharse. Los siguientes en la lista serán Jordi Estivill, Adriana Llena, Thaïs Cloquell, Santi González, Eva Fernández, Jordi Gutiérrez, Marga Olalla, Alfons Romero y Clara Camps.

 

Diputada con proyección

Changue es una de las diputadas con más proyección del partido en el Parlament. Y la CUP ha querido darle visibilidad. Durante la pasada Diada, fue una de las tres personas que subió encima del escenario, en el Born, en un acto que pone punto final a la manifestación de la izquierda independentista que se celebra cada 11 de septiembre, en la que, además, defendió el municipalismo y advirtió de la importancia contra la extrema derecha. Hay que tener en cuenta que en las elecciones de mayo del 2023 también es posible una entrada de la ultraderecha en el consistorio.

La CUP de Barcelona, en manos de una gestora, no se encuentra en sus mejores horas. A las últimas elecciones municipales, con Anna Saliente al frente, pasó de tres a cero concejales, de un 7,4% de los votos a un 3,9%. Obtuvo pocos más votos que la candidatura Primarias de Jordi Graupera, que afectó al conjunto de fuerzas independentistas.