La multinacional tecnológica norteamericana Cisco Systems mantendrá la inversión para transformar la antigua fábrica de Ca l'Alier de Barcelona en su centro mundial de investigación de las llamadas ciudades inteligentes (smart cities) y la Internet de las cosas (Internet of Things). El plan|plano original, una inversión de 37 millones (22 de Cisco y 15 de la francesa Schneider Electric), fue paralizado por la administración de Ada Colau. Schneider se retiró y ahora el Ayuntamiento tendrá que asumir la pérdida con diez millones de dinero público.

Además, Ca l'Alier acogerá las oficinas del Barcelona Institute of Technology (BIT, un centro de start-ups), salas de investigación, espacios técnicos y zonas ajardinadas de uso público y acceso libre. La Fundación BIT desarrolla varios proyectos en la línea de acoger una incubadora para start-ups tecnológicas y espacios de colaboración con empresas que desarrollen proyectos de este tipo en la ciudad.

En un comunicado este sábado, el Ayuntamiento ha anunciado que el proyecto de rehabilitación del complejo fabril se acabará en mayo de 2018. El teniente de alcalde de empresa, Jaume Collboni, ha calificado el nuevo acuerdo de "salto cualitativo importante para reforzar la apuesta de la ciudad por el distrito 22@", en el Poblenou. También ha destacado que el nuevo proyecto puede crear un centenar de puestos de trabajo.

Este proyecto arrancó en tiempos del alcalde Jordi Hereu. Su sucesor, Xavier Trias, se puso manos a la obra en julio del 2014. El edificio sería "la primera pieza" del futuro Smart City Campus, un proyecto de cooperación publicoprivada que tiene que atraer empresas y emprendedores en torno a aquel concepto.

El proyecto de rehabilitación prevé convertir la antigua fábrica en un edificio inteligente y de cero emisiones, incluyendo elementos de autosuficiencia y gestión inteligente de los recursos.