Carles Font, entrenador del Tenis Taula Cassà fue expulsado por animar a uno de sus jugadores en catalán durante el Campeonato de España de categorías benjamín, infantil y sub-23, celebrado en Blanes este domingo 26 de junio. Ninguna ley obliga a los entrenadores a dirigirse en castellano a sus jugadores. La Plataforma Proseleccions Catalanes explica el caso en su web. 

El técnico explica que él siempre anima a sus jugadores en catalán, que es el idioma en el que hablan siempre, y que todo el mundo lo ve como un hecho natural. No obstante, en uno de los partidos, el árbitro le sacó tarjeta amarilla y le exigió qué utilizara al castellano para animar su jugador, argumentando que no sabía si Font animaba a su jugador o le estaba dando órdenes técnicas, una acción no permitida. 

El técnico siguió animando a su jugador en catalán, diciéndole "Vinga, va, som-hi, Andreu!". El colegiado lo expulsó.

Ni caso

Font fue a buscar a la jueza-árbitro del campeonato, Carmen Torrado, que le dijo que no podía hacer nada porque el partido estaba en juego y que no podría acercarse a la pista porque había sido expulsado. Font quiso hacerle ver que era una injusticia y que el partido debería detenerse, pero la jueza no le hizo caso.

El técnico considera que "el más perjudicado por esta situación es el jugador, porque por culpa de la voluntad de protagonismo del árbitro no puede concentrarse en el partido. Yo en ningún momento falté al respecto al árbitro y es injusto, vergonzoso y lamentable lo que ha "pasado".

El técnico añade que dos jugadores de otro club que estaban allí cerca quisieron interceder y hablar con el árbitro para hacerle ver que no estaba dando instrucciones al jugador sino animándole, pero el árbitro se excusó diciendo que como no entendía lo que decía Font, no podía estar seguro de que no fueran órdenes técnicas.

"Problema: somos catalanes"

Font remarca: "El problema es que somos catalanes y no quieren que hablemos en nuestra lengua. A un técnico chino, ruso o inglés nadie le dice nada, y en los campeonatos en otros países todo el mundo puede hablar el idioma que quiera".

Font explica que no es la primera vez que vive una situación como esta. Hace unos años en Almería ya le pasó algo parecido en las semifinales de dobles sub-21, cuando otro árbitro también quiso imponer el castellano a su compañero entrenador y lo expulsó por hablar en catalán.

El Tennis Taula Cassà ha presentado una reclamación a la Federación española que, cuando menos, serviría para obtener una pequeña victoria moral. Además, Font comenta que la jueza-árbitro Carmen Torrado le reconoció que no era justo lo que había pasado y que el Colegio de árbitros se reunirá para evitar que se repita esta situación.