Año de retos para la start-up de cosmética natural Saigu. La firma, que nació de la mano de los emprendedores Gerard Prats y David Hart, tiene previsto abrir su primera tienda física durante el primer trimestre de 2023 en Barcelona. "Llegamos prácticamente cinco años en el mercado, somos rentables desde finales de 2021 y ahora el reto es apostar por el retail", apunta Hart en una entrevista para ON ECONOMIA. La compañía subirá la persiana de su primer establecimiento en el distrito de Gràcia de la capital catalana y será la primera de "tres o cinco". "En una primera fase queremos abrir en Barcelona y más adelante tener entre tres y cinco en las principales ciudades españolas". Ambos emprendedores son de Menorca, montaron el negocio en Barcelona y lo hicieron crecer en la aceleradora de empresa Lanzadera, en Valencia

"Aunque tengamos el laboratorio en Barcelona y el equipo allí, todo el storytelling tiene un guiño a las baleares, Saigu Cosmetics se inspira en muchas cosas de Menorca y siempre que podemos le damos protagonismo a la isla", explica Hart. De hecho, Saigu es un nombre menorquín que significa agua y que para los fundadores de la marca "es el reflejo de muchas cosas". Los dos nacieron allí, la transparencia del agua a la hora de producir, lo que quieren comunicar, la filosofía de la empresa y la sostenibilidad. "Al final, Menorca es de las pocas islas que todavía se mantiene, está explotada, pero no tanto como las otras", señala. 

"Queremos cambiar la industria de la cosmética"

¿Cómo empezó todo? Gerard Prats es químico y estuvo de director técnico en una fábrica de cosméticos. Harts, por su parte, había fundado otra start-up, Código Nuevo, y es especialista en marketing y estrategia online. Con todos estos ingredientes, la experiencia de una fábrica de cosmética y la filosofía de la sostenibilidad que ambos compartían, decidieron arrancar el proyecto. "Todo surge de allí, de querer cambiar la industria de la cosmética. Este sector mueve muchos millones de euros al año y nosotros queríamos cambiar el chip, apostar por productos buenos, de calidad y respetuosos con el medio ambiente". 

La inversión inicial fue de 3.000 euros y una fábrica de cosméticos les ayudó en su primer año y medio de vida. Sus tres primeros artículos fueron la base de maquillaje, la máscara de pestañas y el pintalabios. A día de hoy cuentan con 10 productos en el mercado, para este año prevén incorporar cinco más y a largo plazo se quieren posicionar en el mercado siendo una marca de cosmética con 40 o 50 productos. "Esto lo vemos a cuatro o cinco años vista. Trabajamos con un timing de un año y preferimos calidad antes que cantidad", indica Hart. ¿Cuál es el producto estrella? "Sin lugar a dudas es la base de maquillaje, es lo que más nos piden desde los principios de la marca y creo que es por la calidad". 

Rumbo a los seis millones

Saigu cuenta con unos 40.000 clientes anuales, el 97% es target femenino y en un par de años esperan tener un ticket medio de 70 euros. "Comercializamos un producto semipremium; no es un producto para adolescentes que quizás prefieren algo low cost, para nosotros la calidad precio con la que trabajamos es increíble", declara. En cuanto a la facturación, desde la compañía prevén alcanzar los 6 millones de euros este 2023 y a largo plazo no se quieren aventurar, pero aseguran que "hay mucho margen de crecimiento". "No nos engañemos, en cuanto a producto los márgenes son muy grandes, queremos alejarnos de ese 80% de margen de otras marcas y ganar en sostenibilidad", confiesa Hart. 

Más allá del primer punto físico y de alcanzar los 6 millones, como objetivos para este año la start-up quiere pasar de los 15 trabajadores a los 22 y seguir creciendo con capital propio. "A corto y medio plazo no tenemos previsión de ronda de financiación. Somos rentables desde hace más de un año y solo nos plantearíamos captar capital si quisiéramos apostar fuerte por el internacional o para abrir más tiendas, pero por el momento no está en la hoja de ruta". 

¿Productos masculinos? "Si pensamos en Saigu Cosmetics a lo grande sí que vemos una línea masculina, todo es cuestión de foco y no lo descartamos para nada", argumenta. "Lo principal es tener un producto muy bueno, queremos revolucionar el mundo de la cosmética con artículos de alta calidad y concienciar a aquellos que todavía no lo están". ¿Un sueño de marca que os gustaría cumplir? "Nos encantaría tener una tienda en Menorca, que es de donde somos y en lo que está inspirada la marca. Quizás no para este año, pero sí para el año que viene. Es algo que nos han pedido mucho los clientes, que consideramos que encajaría bien y que serviría para potenciar la marca. No sabemos si un establecimiento o un formato pop-up, pero está claro que sería un sueño tener algo allí", acaba Hart.