España recupera la normalidad energética después del apagón histórico que vivió el pasado lunes. Lo hace aunque las centrales nucleares permanecen cerradas, ya que están programadas para parar si no se pueden conectar a la red y tardan un mínimo de dos a tres días al volver a funcionar. Eso ha hecho que aumente el peso del ciclo combinado en la generación eléctrica, que es el que combina turbinas de gas y vapor para convertirlas en electricidad.

A las siete de la tarde de este martes, según la aplicación en tiempo real de Red Eléctrica, un 30% de la electricidad generada en España, mientras que un 20%, era hidráulica y otro 20% fotovoltaica (por la noche caía y durante el día llegaba a picos del 35%) y un 17,07% era eólica. Aunque la causa más probable del apagón fue la caída importante de generación fotovoltaica, también las renovables han sido protagonistas en la recuperación y han conseguido mantener en un 60% renovable, que más o menos es lo mismo que antes del apagón en muchos de los días. La energía nuclear representa un 0% de la generación de este martes, a pesar de que de los 2.500 MW que se importan de Francia (un 10% de la demanda eléctrica), una parte puede provenir de los reactores del país vecino.

Centro de control de la red de Redeia (antes Red Eléctrica). Foto Redeia
Centro de control de la red de Redeia (antes Red Eléctrica). Foto Redeia

El último día laborable antes de la pandemia, el viernes 25 (a la misma hora), los ciclos combinados generaron el 8,79% de la electricidad y las nucleares un 12,18%. La hidráulica solo representó un 8,7% de la generación, la mitad que este martes, y la eólica, que depende de si sopla el viento, un 21%. La energía solar representó un 35,51%, 15 puntos más que este martes. Por lo tanto, en términos comparativos, los ciclos combinados se han multiplicado por cuatro y la hidráulica por dos para cubrir la demanda que no se cubre con nucleares.

De todos modos, no se puede coger el ejemplo del pasado viernes como paradigmático, ya que el origen de la energía varía mucho en función de las necesidades de cada día y de las condiciones climáticas, que además determinan a veces si se tienen que cerrar reactores nucleares porque se puede cubrir la demanda con otras fuentes de energía.

Así, si lo comparamos con el balance energético español del pasado 2024, el ciclo combinado generó este martes una proporción el triple de grande que al total de 2024, cuando fue del 13,6%. La nuclear aportó un 10% de la electricidad, la hidráulica un 13,3%, la eólica un 23,2% y la fotovoltaica un 17%. El resto del mix lo completaron entre la cogeneración (6,2%), la solar térmica y resto de renovables, fuel y gas y carbón, estos últimos con menos del 2%.

Se calienta el debate nuclear

El apagón llegó en un momento de debate intenso sobre el apagón nuclear, que se tiene que completar en el 2035 en España. La central de Almaraz ya se encuentra camino al cierre, aprobado por el Consejo de Ministros, y se tendrá que cerrar el año 2027. Los defensores de las nucleares han visto en el apagón un argumento para alargar la vida, mientras que los defensores de las renovables y del cierre, encabezados por el presidente Pedro Sánchez, han defendido el contrario.

El consejero delegado de Endesa, José Bogas, dijo este martes que no sería "prudente" cerrar ahora las nucleares, mientras que el presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, aseguró que "el debate sobre la energía nuclear se ha acabado con el apagón". "Hoy sabemos que se tiene que ampliar la capacidad nuclear de España".

En cambio, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dijo que estas centrales "lejos de ser una solución, han sido un problema", porque la recuperación "con más dependencia nuclear no habría sido tan rápida, sino más lenta". El experto en renovables Jaume Morron destacaba en su Twitter que "más de 24 horas después del gran apagón, los kWh de origen nuclear siguen sin aparecer al mix eléctrico de la España peninsular. Y a pesar de eso, tenemos corriente".

Tienen parte de razón ambos argumentarios. Mientras se acaban de aclarar las causas del apagón, Red Eléctrica sí que reconoció que el origen estuvo en dos apagones repentinos de generación ubicados en el suroeste de España, "posiblemente de origen fotovoltaico" que alcanzaron una caída de 15.0000 MW y provocaron un colapso en cadena de la red. La red eléctrica necesita, para mantener la tensión, generar la misma cantidad de energía que se demanda, y si hay un fuerte desajuste de producción o de demanda, puede reaccionar con un paro en cadena.

La dispersión de fuentes de generación que provoca el aumento de las renovables, con parques fotovoltaicos y eólicos dispersados por todo el territorio, genera problemas de estabilidad reconocidos por Red Eléctrica. Y parece que estos problemas de estabilidad podrían estar detrás de la caída, dado que se asocia a posibles paros fotovoltaicos. Las causas concretas están por confirmar. Las centrales nucleares aportan más estabilidad a la red, pero esta estabilidad también podrá incorporarse con más almacenaje y con la adaptación de los sistemas de control y seguridad de la red al nuevo panorama. Además, es cierto que las nucleares se reactivan con menos velocidad. Además de las mejoras tecnológicas, la interconexión con Francia tiene que jugar un papel clave para evitar nuevas desconexiones.