Repsol ha puesto en cuarentena todas sus inversiones industriales en España después del anuncio de Pedro Sánchez y Yolanda Díaz de que convertirán en permanente el impuesto a las energéticas. Josu Jon Imaz, consejero delegado de la multinacional española, lo dejó claro este jueves ante los analistas. Entre los proyectos que están en peligro se encuentran dos inversiones en Catalunya, concretamente en Tarragona, que suman más de 1.000 millones de euros, según ha podido saber ON ECONOMIA.

La compañía que preside Antoni Brufau es la más afectada por el impuesto a las energéticas y este año ha pagado 450 millones. Seguir pagando cifras como esta por inversiones que son industriales, y por tanto, generan actividad económica y empleo, y alguna de las cuales está en números rojos, como la química, “castiga a empresas como Repsol”, considera la compañía. De hecho, en algunos casos no saldrán los números si el impuesto se hace permanente, por lo que se paralizarán.

Eso puede pasar a dos proyectos en Tarragona, una de las zonas de España donde Repsol tiene mayor peso industrial. Se trata de una ecoplanta y un electrolizador, instalaciones que están proyectadas para más allá de 2025 y, de hecho, se encuentran aún en fase de diseño. Por ello, ahora se estudiará si vale la pena seguir con ellos o no. Fuentes de Repsol declinaron valorar inversiones en concreto y se remitieron al comunicado de este jueves.

Repsol es la empresa más afectada por el impuesto a las energéticas: ha pagado 450 millones este año

La ecoplanta tiene una inversión prevista de entre 700 y 800 millones de euros y debería ubicarse en el municipio de El Morell. Lo que hacen este tipo de instalaciones es convertir residuos en metanol. En concreto, la que proyecta Repsol procesaría cada año alrededor de 400.000 toneladas de residuos sólidos no reciclables de municipios de la zona para producir unas 220.000 toneladas de metanol.

Este proyecto recibió 106 millones de los fondos para la innovación de la Comisión Europea, pero no fondos NextGen, pues supone un ahorro de emisión de 200.000 toneladas de CO2. Pero a pesar de las ayudas, está en estudio pues el impuesto pone en riesgo su viabilidad y, de hecho, Repsol ya andaba a la búsqueda de un socio para llevarla a cabo.

La ecoplanta de El Morell tiene una inversión prevista de entre 700 y 800 millones de euros

El segundo proyecto, en el que Repsol participa en consorcio con Enagás Renovable, Iqoxe y Messer, es un electrolizador de 150MW que debía ser el mayor de la Península Ibérica y conllevaba una inversión de 320 millones de euros. Su función es producir hidrógeno renovable con un mínimo consumo de agua y tendrá, si se termina construyendo, un colector de hidrógeno que lo transportará a la petroquímica de Tarragona y a la ecoplanta de El Morell, para fomentar el uso de esta fuente de energía en la zona.

El electrolizador se enmarca en el Valle del Hidrógeno de Catalunya y el Corredor del Hidrógeno del Ebro, pues el país quiere ser referente en esta nueva fuente de energía coincidiendo con la apuesta del Gobierno por el hidrógeno verde y el H2Med. Por ello, llama la atención que estas inversiones terminen conllevando un impuesto que las pone en riesgo, pues no casa con la apuesta anunciada por la ministra de Energía, Teresa Ribera, y el propio Pedro Sánchez.

El peso de Repsol en Tarragona y España

Repsol emplea a unas 3.000 personas en Tarragona, de las que aproximadamente la mitad de forma directa. La compañía destaca que se trata de “un equipo de personas muy cualificado y eficiente”, pues se dedica a tareas tan distintas como producción, refino, petroquímica, logística, ingeniería, I+D, sistemas de información, etc…

Repsol ha llevado a la justicia el impuesto a las energéticas, al considerarlo discriminatorio y anticonstitucional, además de subrayar que no recibe “beneficios caídos del cielo”. El negocio del refino no es regulado, por lo que está abierto a competencia. De hecho, la energética sufrió pérdidas de más de 7.000 millones en 2019 y 2020 en este negocio.

Pese a ello, en los últimos 15 años, el sector del refino ha invertido más de 7.000 millones en España, por lo que cuenta con instalaciones de las más modernas y eficientes de Europa. Se calcula que beneficia y da empleo a 200.000 familias en España gracias al empleo industrial que genera, tanto de forma directa como indirecta, con salarios por encima de la media.

Repsol ha disparado este año las inversiones hasta los 4.362 millones, el 41% de los cuales son en España

Volviendo a Repsol, líder destacado del sector en España, es la empresa del IBEX que más impuestos ha pagado a nivel estatal en lo que llevamos de año. La energética pagó impuestos por 10.890 millones entre enero y septiembre, como recogen las cuentas presentadas esta semana a la CNMV, de los que el 70% los abonó en España, es decir, 7.441 millones. Además, pagó por sociedades más de la media y del tipo legal del 25%.

También es uno de los grandes inversores del Estado. En los primeros nueve meses de 2023, disparó sus inversiones un 82%, hasta los 4.362 millones, de las que España fue el primer destino con el 41% del total, por encima incluso de Estados Unidos. Sus accionistas se benefician de todo ello, pues subirá un 14% el dividendo con un pago de 0,4 euros brutos por acción en enero.