Frente común empresarial contra la opa del BBVA al Sabadell. Patronales y asociaciones económicas catalanas han enviado una carta conjunta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la cual le piden que detenga la operación. Las entidades preparan también una campaña publicitaria. La petición se produce la misma semana que Sánchez ha anunciado un proceso de consulta pública sobre la opa antes de decidir si entra a poner condiciones.
La iniciativa ha surgido de la Cambra de Comerç de Barcelona, presidida por Josep Santacreu, y se han sumado todas las cámaras de comercio catalanas, Foment del Treball, Pimec, la Cecot, Fira de Barcelona, el Col·legi d'Economistes de Catalunya, Femcat, el RACC y Barcelona Global.
La carta pide a Sánchez que detenga la opa por la importancia del Sabadell para la economía catalana y sus empresas, especialmente las pymes, mientras que la campaña busca una participación masiva en la consulta pública para expresar al gobierno español la contundente oposición de la sociedad catalana.
En concreto, las entidades que firman la carta presentan cinco argumentos en contra de la operación: la excesiva concentración de poder empresarial y financiero; la pérdida de un canal de crédito y servicios financieros especializado en empresas y “proyectos de menor dimensión”; la pérdida de empleo y de oficinas bancarias, “con el consiguiente aumento del riesgo de exclusión financiera”; la fuga de talento financiero, y la cohesión social y territorial, “base de una economía abierta y diversa en una sociedad plural”.
Las patronales y organizaciones económicas calculan que la desaparición del Banc Sabadell supondría la pérdida de entre 54.000 y 70.000 millones de euros de crédito disponible para las pymes, además de que se perdería una “entidad arraigada a la cultura industrial de Catalunya”, que sería “difícilmente reemplazable por otros operadores, por sus propias características y por su importancia cuantitativa”.
“Los firmantes defienden un modelo de país diverso, abierto y plural, con centros de decisión repartidos territorialmente, y recuerdan que una mayor concentración de poder económico, financiero y empresarial en un solo punto geográfico puede desvirtuar la cohesión social y territorial que demandan la sociedad y la economía españolas”, afirman las organizaciones.
Por todo ello, reclaman a Sánchez que, “en ejercicio de sus competencias, vele por la preservación de un modelo bancario más próximo, competitivo y arraigado al territorio y tome una decisión determinante para la trayectoria consolidada de un gran proyecto empresarial que también es representativo de un proyecto de país”.
Fase decisiva de la opa
Todo el empresariado catalán se había manifestado en contra de la opa del BBVA sobre el Sabadell desde que se presentó, hace un año, y de forma individual, algunas organizaciones habían llevado a cabo algunas iniciativas. Además, organizaciones como Pimec y las cámaras participaron en el estudio de mercado de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Pero, hasta ahora, no habían realizado ninguna iniciativa conjunta.
Las entidades han elegido un momento clave para el éxito de la opa, cuando, tras las condiciones impuestas por la CNMC y aceptadas por el BBVA, debe intervenir el gobierno español. El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, también se ha mostrado en contra, y se espera que pueda intervenir para imponer más condiciones, aunque estas no pueden referirse a competencia, sino a cuestiones de interés general, como la cohesión territorial, la inclusión financiera y el empleo.
Por ahora, el Ministerio de Economía está esperando respuestas a la encuesta que publicó en su página web el martes. Las personas que quieran participar —está abierta a todo el mundo— tienen hasta el 16 de mayo para hacerlo, y después el gobierno español tiene hasta el 27 de mayo para analizar las respuestas y decidir si interviene para analizar la operación o no. Si la decisión es positiva, como se espera, tendrá un mes para emitir su dictamen y las posibles condiciones.