El grupo constructor Comsa se ha adjudicado por 70 millones de euros el proyecto de expansión de las líneas verde y amarilla del metro de Lisboa, a través de la Unión Temporal de Empresas (UTE) constituida con su filial portuguesa Fergrupo, la ingeniería Comsa Industrial y la compañía portuguesa Zagope, especializada en el desarrollo de obras públicas. El proyecto contempla la unión de las líneas verde y amarilla con la finalidad de formar una línea circular para el recorrido del transporte público en la capital portuguesa y que se prevé entre en servicio en 2024. Las obras incluyen la construcción de un nuevo tramo de 1,9 km de vías, entre las paradas de Rato y Cais de Sodré -incluyendo vía, catenaria y sistemas-, dos nuevas estaciones (Estrela y Santos) y dos nuevos pozos de ventilación. Además, también realizarán la adaptación de la estación de Cais de Sodré, donde se hará un nuevo vestíbulo, y el pozo situado junto a la estación de Rato.   

La presencia del grupo Comsa en el país luso se remonta a hace más de 30 años, cuando constituyó su filial Fergrupo. En su cartera actual de comedidos se encuentra el proyecto de electrificación de la línea ferroviaria del Algarve, que se adjudicó el pasado año, y sigue ejecutando el proyecto de renovación de la línea Beira Alta, en el tramo Pampilhosa – Santa Comba Dão. Asimismo, la compañía continúa avanzando en la ejecución del tramo del Metrobus de Mondego entre Serpins y Alto de São João. 

Otro proyecto que ha asumido, desde finales de 2022, es la modernización de vía y catenaria de la línea Lisboa-Cascais, una de las más utilizadas en el país luso, con un importe de 30 millones de euros. Esta obra permitirá homogeneizar la electrificación de la línea con la del resto de la red portuguesa y reducir el gasto energético de los Ferrocarriles Portugueses, CP. El proyecto contempla la reconfiguración de vías de las estaciones de Algés, Oeiras, Carcavelos, São Pedro y Cascais, la nueva conexión este al parque de material móvil de Carcavelos y la instalación de nuevos desvíos en Santos, Belém y Santo Amaro. Se construirá una subestación en Sete Rios y se implantará un nuevo sistema de señalización y control ETCS nivel 2. Además se implementarán sistemas de video vigilancia e información y se intervendrá en estaciones y paradas, pasos a nivel y en cruces de vía en apeaderos.

A nivel global, Corporación Comsa cerró 2022 con una cartera de contratación ampliada hasta los 1.562 millones y una facturación de 886 millones de euros, cifra que representa un aumento del 17% respecto al ejercicio anterior. La compañía ha reducido la deuda bancaria de más de 1.000 millones de euros en 2016 hasta menos de 60 millones en 2022, lo que representa menos de dos veces el Ebitda del grupo.