El Banco de España ha sido la última institución en destacar la fortaleza de la banca europea, descartando un efecto mayor de la crisis financiera originada en Estados Unidos sobre las entidades bancarias del Viejo Continente. Pese a que el temor a un efecto contagio originado por la quiebra de Silicon Valley Bank parece haberse mitigado, la realidad es que el caso sigue dejando algunos resquicios que alimentan las dudas de que Europa asista a un problema similar al vivido por Estados Unidos en el último mes. SVB, y la posterior quiebra de Signature Bank, ha supuesto un antes y un después no solo en el sistema bancario estadounidense, sino de todo el mundo.

Pese a ello, Pablo Hernández de Cos, gobernador del Banco de España, ha subrayado este lunes que el impacto sobre las entidades bancarias de la eurozona originado por la crisis financiera en EE.UU. será “relativamente suave”, destacando la fortaleza y robustez de la banca del Viejo Continente. Hernández de Cos ha emitido un mensaje similar al que lanzó la presidenta de la patronal de la banca española, Alejandra Kindelán, y al emitido por varios miembros del Banco Central Europeo. Todos ellos valoran la crisis bancaria originada en Estados Unidos y la afección que ha tenido sobre Europa, con Credit Suisse como ‘mártir’ del terremoto bancario.

La banca viene siendo el sector estrella de los últimos meses

Pese a ello, tanto Kindelán, como Lagarde, como ahora el gobernador del Banco de España, creen que el impacto de la crisis financiera será “relativamente suave”, destacando la buena demarcación de la banca europea que, descontando los últimos problemas originados por el caos en Estados Unidos, vienen siendo el sector ‘estrella’. La industria bancaria se ha visto fortalecida por las progresivas subidas de tipos de interés llevadas a cabo por el Banco Central Europeo. Pese a que el contexto económico no es halagüeño, la demanda bancaria y la baja morosidad en el sector han valido para ver como los bancos ensanchaban sus márgenes de beneficios gracias al endurecimiento monetario.  

En esas, y ante un escenario como el vivido en 2022 y a comienzos del presente curso, la banca ha ganado enteros, llenando sus arcas gracias a los mayores intereses puestos sobre los productos bancarios. Aunque la crisis financiera de Estados Unidos ha alimentado las dudas de un posible terremoto del sector también en Europa, por el momento, tan solo Credit Suisse ha salido mal parada. Cabe destacar que el estallido de la crisis del sector en EE.UU. ha sido la gota que ha colmado el vaso de la compañía helvética, que, en los últimos años, ha presentado varios problemas de liquidez debido a una serie de inversiones nefastas.

El Banco Central Europeo deja en el aire la próxima subida de tipos

Hernández de Cos ha destacado que las tensiones sobre el sector suponen un “elemento adicional de incertidumbre” sobre las decisiones de política monetaria en Europa. Y es que, las turbulencias del sector se dieron a escasos días de la última subida de tipos de interés que realizó el Banco Central Europeo. Pese a que había expertos que apuntaban a una posible desaceleración del endurecimiento monetario, la institución liderada por Christine Lagarde acometió su sexta subida de tipos de interés en menos de un año. Con la del pasado 16 de marzo, las tasas de interés de la eurozona se mantienen sobre el 3,50%, el nivel más elevado desde octubre de 2008.

Todo ello en un escenario dominado por el miedo inversor a un terremoto bancario en la eurozona el cual, de cara al BCE, no se dará. Pese a que el equipo de Lagarde recalcó que dotarían de liquidez a la banca en el caso en el que fuera necesario, también han destacado la resiliencia del sector. Hernández de Cos, quien también forma parte del consejo del Banco Central Europeo por su puesto como gobernador del BdE, ha asegurado este lunes que el organismo bancario central está monitoreando la incertidumbre bancaria, por si pudiera darse un recrudecimiento de la situación.

El Banco de España señala a la incertidumbre sobre la inflación como elemento clave

Sea como fuere, son varias las personalidades que han destacado la buena demarcación de la banca europea. Alejandra Kindelán, presidenta de la AEB, remarcó que la banca española “está fuerte, saneada y muy bien regulada”. Además de ello, y refiriéndose a los problemas vistos sobre Credit Suisse, la líder de la patronal de la banca española descartó un caso similar en el país ibérico, ya que el sector está mejor gestionado y es más seguro que en Suiza.

Además de esto, varios analistas confirman que los casos vistos en Estados Unidos se han dado en dos entidades con negocios totalmente diferentes a los que manejan la mayoría de los bancos europeos. Parece que hay un alineamiento entre las grandes personalidades europeas de la banca que descartan un terremoto en el sector. Por lo pronto, y aunque el BCE volvió a elevar los tipos en 50 puntos básicos el pasado 16 de marzo, la institución de Lagarde no se ha aventurado a decir el nivel de la próxima subida de tipos, remarcando la necesidad de endurecer las políticas monetarias en función de cómo evolucionen los datos macroeconómicos.

El gobernador del Banco de España y miembro del consejo del BCE ha advertido de que la problemática sigue estando en la incertidumbre que gira en torno a la inflación, sobre todo con los aumentos de la subyacente.