Los bajistas siguen haciendo caja con la sangría de Grifols en la bolsa española. Los fondos oportunistas suben sus posiciones cortas contra la farmacéutica catalana, que sufre un nuevo revés bursátil tras la advertencia de Moody's y el tercer informe acusatorio de Gotham City Research sobre su contabilidad. Se espera que Grifols presente las cuentas auditadas por KPMG antes de que termine la semana, mientras que desde la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) siguen sin publicar el análisis sobre el caso. En este contexto, Grifols se hunde en bolsa a mínimos de 2012 y pierde un 55% de su valor en lo que va de año.

Todo lo que rodea a Grifols ahora mismo es incertidumbre, un factor que no suele gustar a los inversores, que apuestan en el mercado por activos con los que poder generar rentabilidad. La compañía ya pierde un 55% de su valor en lo que va de año, suponiendo esto la reducción en más de 4.000 millones de euros de su capitalización de mercado. Por el lado contrario, se encuentran los hedge funds o fondos de cobertura que tratan de ganar dinero con la caída de empresas como Grifols.

Estos oportunistas venden acciones de un valor con la pretensión de que su precio caiga, y así poder recomprarlas después más baratas. De este modo, los inversores toman prestadas las acciones de una firma, que tendrán que devolver en un plazo establecido, y las venden. Los últimos acontecimientos en el seno de Grifols han atraído a los bajistas, que ya elevan sus posiciones cortas hasta un 2,78% de su capital, un nivel que nunca antes habían alcanzado en la empresa de hemoderivados.

Los bajistas presionan a Grifols con un 2,78% en cortos

La firma que cuenta con un mayor número de acciones en corto es Qube Research & Technologies, acumulando una posición del 1,57%. Qube apostó contra Grifols el pasado 29 de enero con un 0,5%, varias semanas después del primer informe de Gotham que sacudiría a la cotizada y marcaría su rumbo hasta hoy. El fondo ha ido aumentando su posición, a pesar de los repuntes de Grifols en el Ibex-35, siendo paciente hasta ver caer de nuevo el valor.

Por otro lado, se encuentra Millennium International Management, que ya cuenta con cortos del 0,62%. La firma especuladora lleva presionando la cotización desde finales de 2023 y ha ido variando su posición hasta el nivel actual. El último movimiento registrado por la CNMV es del 4 de marzo, pocos días después de la presentación de resultados de Grifols. 

El último fondo de cobertura que presiona al valor es AKO Capital, un viejo conocido de la bolsa española por su actividad en otras compañías. Actualmente, cuenta con cortos del 0,59%, tras elevar su posición recientemente desde el 0,41% que poseía el pasado 8 de enero, antes del informe de Gotham. La firma lleva desde principios del año pasado variando su posición bajista en Grifols, beneficiándose de los peores momentos de la empresa en el mercado.

La CNMV defiende las posiciones cortas

A este respecto, el presidente de la CNMV, Rodrigo Buenaventura, ha defendido recientemente la función de las posiciones cortas en el mercado de valores. En este sentido, el máximo dirigente del supervisor español ha destacado durante la celebración del Finance Summit Day en Barcelona que "aportan valor al mercado y lo hacen más líquido". Además, ha negado que sea una forma de atacar a las empresas sobre las que se posicionan.

Por otro lado, Buenaventura ha señalado que el análisis de la documentación y las aclaraciones de Grifols sobre sus cuentas y vínculos con sociedades como Scranton Enterprises "está muy avanzado" y su intención es hacer públicas las conclusiones cuanto antes. Declaraciones que llegan un día después de reiterar que la publicación del análisis tardaría "unas semanas más". En cualquier caso, se espera que antes Grifols presente sus cuentas auditadas.

La semana pasada, la compañía publicó su informe de resultados sin la firma de KPMG, su auditor y entidad también en el foco de la polémica. Tampoco fue firmada por uno de los miembros del consejo de administración, James Ostos, exembajador de Estados Unidos en España y que ahora ocupa un sillón en el máximo órgano de decisión de la farmacéutica catalana. El plazo máximo que dio Grifols para presentar las cuentas auditadas "sin salvedades" acaba el viernes 8 de marzo.

Asimismo, con las cifras actuales, los analistas dudan de que la compañía pueda hacer frente a su elevada deuda y su solvencia, entre otras cosas, por su flujo de caja libre negativo. Un factor importante para llevar a cabo inversiones o reducciones de pasivo. Algo que la compañía ha tratado de detallar más a fondo, explicando que sus previsiones contemplan números positivos para este mismo año. Grifols confía en la venta del 20% de Shanghai RAAS como una operación clave para aliviar esta situación financiera.

Gotham señala las piruetas contables entre Haema, BPC y Scranton

Y en medio de este enrevesado asunto, Gotham aprovecha para seguir cuestionando la contabilidad de Grifols. En su nuevo informe, el fondo de inversión pone el foco en las operaciones entre Haema y BPC con Scranton. La farmacéutica compró ambas empresas en verano de 2018 y se las vendió al holding neerlandés, segundo máximo accionista de Grifols, a finales del mismo año. No obstante, el grupo sigue controlando la actividad de ambas sociedades, consolidando sus resultados, y se reserva una opción de recompra del 100%.

Gotham pone en duda ahora que, según un informe de Kepler Cheveaux, la compañía ha explicado que los 321 millones documentados en sus cuentas como “otros activos por operaciones vinculadas” se corresponden con un acuerdo de cash pooling o tesorería compartida entre Haema y BPC con Scranton. Se trata de un acuerdo para la gestión de una caja única con el efectivo entre una matriz y sus filiales.

No obstante, para Gotham, se trata, en realidad, de un préstamo de las dos filiales a Scranton, “que no tiene intención de repagar en efectivo”. En este sentido, denuncia que "el dinero real de los créditos en efectivo realizados por los accionistas de Grifols van a ser condonados en pago de dividendos declarados, que son elementos de capital con valor contable. Si estamos en lo cierto, ¡se trata de cancelar préstamos en efectivo a cambio de nada en efectivo! ¿Es dinero a cambio de nada?", apunta Gotham.