El 30 de junio expiran algunas de las medidas en vigor para combatir los efectos económicos de la Guerra de Ucrania sobre el bolsillo de los españoles, por lo que el Gobierno español debe decidir en las próximas semanas si prorroga o elimina la reducción del IVA de los alimentos o la ayuda para el abono transporte en plena campaña electoral. En frente tiene a la Comisión Europea(CE) que presiona para una retirada de los estímulos. No obstante, el Gobierno español ya ha dado una pista a Bruselas de sus intenciones antes incluso del adelanto electoral, pues en el Plan de Estabilidad dijo que “por lo que respecta a los efectos de las medidas excepcionales derivadas de la crisis energética por la guerra de Ucrania, en 2024 se contempla la reversión de las medidas aprobadas en 2022 y 2023”.

Varios ministros han salido a la palestra. Nadia Calviño, vicepresidenta primera y responsable del área económica del Gobierno, habló esta semana de esperar a ver cómo evolucionan las cosas, un mensaje reiterado este jueves por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que ha asegurado que la rebaja del IVA de los alimentos, la medida de mayor calado económico y social, se mantendrá si persiste la “anormalidad” en los precios.

Más tajante se ha mostrado la vicepresidenta tercera y responsable del área energética, María Teresa Ribera, que ha recordado a la CE que la mayoría de las medidas energéticas están vigentes hasta final de año. La CE ha solicitado este lunes que, ante la estabilidad de los precios de la luz y el gas, los estados retiren ciertas medidas energéticas como el límite de ingresos a energías inframarginales -nucleares, renovables-. La ministra ha declarado que la propuesta de Bruselas es “un escenario optimista con respecto a la capacidad que tiene Europa de ir transformando su modelo energético y defendiendo la necesidad de reducir la dependencia de los mercados procedentes de Rusia”.

Reducción del IVA de los alimentos

Entre las ayudas que caducan este mes, cabe citar el número de personas beneficiadas por la reducción del IVA (entre 4 y 5 puntos porcentuales) de 14 alimentos de gran consumo, que suponen algo más de un tercio de la cesta de la alimentación, con productos como los huevos, las patatas, las frutas y hortalizas, la leche, el arroz y las pastas y harinas. El efecto de la medida sobre los alimentos está en entredicho y el propio Gobierno ha declarado que no es tan eficaz. El precio de los alimentos se ha incrementado un 3,7% desde enero, cuando se puso en marcha la reducción impositiva, según los datos del INE que apunta que sin la rebaja fiscal el incremento de los precios habría sido de un 5%. En cualquier caso, en abril los alimentos están un 12,9% más caros que en el mismo mes del pasado año, por lo que la medida ha servido para contener las subidas, pero no para abaratar la cesta de la compra.

Transporte público

Otra de las medidas estrella pendiente de prórroga son las ayudas al transporte público. El Gobierno de España subvenciona el 30% del coste de los abonos urbanos e interurbanos, siempre que las comunidades autónomas aporten otro 20% suplementario. Lo que significa que desde el pasado agosto los usuarios se ahorran la mitad del billete. La medida ha tenido un claro efecto en los precios, pues según el INE el metro y el tranvía son en abril un 24,2% más baratos que hace un año y el autocar y el autobús un 25%. También se subvenciona el precio del transporte marítimo. No obstante, si el Gobierno mantiene la exigencia de que los territorios deban aportar una parte, podría dar al traste con la medida, pues la mayoría de los ejecutivos autonómicos están en configuración tras las recientes elecciones autonómicas y locales.

En tercer lugar, está el apoyo al precio de los combustibles para sectores como el transporte, que en los tres primeros meses del año fue de 20 céntimos por litro de gasoil y en el segundo trimestre de 10 céntimos. El gasóleo ha tenido una fuerte corrección en los precios, pues la última semana se pagaba de media en España a 1,588 euros, según el Boletín Petrolero de la UE, por debajo de los 1,592 del 24 de febrero tras la invasión de Ucrania. La medida de los 20 céntimos generaliza se adoptó con un precio de 1,837 euros. También caduca el tope del precio de la bombona de butano a 19,55 euros, aunque es minoritario respecto al gas natural.

Otras dos medidas que decaen tienen un impacto más limitado: la reducción de un 80% de los peajes eléctricos para la industria electrointensiva y el fin de la prohibición de los desahucios para colectivos vulnerables. Igualmente, está pendiente el fin de la prohibición de despedir en aquellas empresas que se hayan beneficiado de algún tipo de ayudas para amortiguar el aumento de los costes derivados de la guerra de Ucrania.

Medidas que continúan

Como ha recordado este jueves la ministra Ribera, las grandes medidas energéticas no declinan hasta final de año, a pesar de la corrección en la factura. El precio de la electricidad, cuyo IVA está reducido del 10% al 5%, ha sido de media 74,2 €/kWh en mayo, cuando la media del año pasado fue de 167,9 euros, aunque con picos de 700 euros, según OMIE. No obstante, de media se pagó en 2019 a 47,8 euros.

Algo parecido sucede con el gas natural, cuyo IVA está rebajado del 21% al 5%. Según el índice TTF holandés, el gas se compraba en los mercados internacionales a 26,3 euros el 7 de junio, frente a los 77,07 euros de enero de este año o los 303,6 euros en agosto pasado. Hay que remontarse a octubre de 2021 para encontrar precios por debajo de los 26 euros. Igualmente, se mantiene la reducción al 0,5% del impuesto sobre el valor de la producción de la energía eléctrica. El Gobierno ha cifrado en 18.000 millones de euros el coste de las medidas para reducir la factura energética de los españoles desde junio de 2021.

Otras de las medidas que durarán hasta final de año es la limitación de subir más de un 2% los alquileres en las renovaciones anuales y la gratuidad de los abonos ferroviarios para los pasajeros usuales. El tren ha bajado un 9,5% en abril respecto a doce meses atrás, y el coste de los alquileres se mantiene desde principios de año en el 2%, según el INE.