Los españoles están entre los europeos más bancarizados, o lo que es lo mismo, entre los que más adictos a los servicios bancarios. Y entre ellos, despunta el pago con las tarjetas bancarias. Para hacernos una idea de la magnitud, valgan algunos datos: En España hay actualmente, según los datos del Instituto Nacional de Estadística, 42,05 millones de personas con más de 16 años y, sin embargo, hay en circulación 95,8 millones de tarjetas de crédito. Lo que arroja que de media cada mayor de 16 años tiene a su nombre 2,3 tarjetas bancarias. De ellas son:

  • Tarjetas de crédito: 43,35 millones. El dinero sale de la cuenta bancaria del propietario y, por tanto, no se debe pagar intereses. El cargo es inmediato.
  • Tarjetas a débito: 52,42 millones. El dinero es un préstamo a muy corto plazo de días que realiza el banco, aunque generalmente sin intereses, dependiendo del tiempo de devolución. Generalmente, en los cinco primeros meses de cada mes, el banco carga todas las compras realizadas con esta modalidad de tarjeta.

Pero los españoles no solo tienen tarjetas, además, las utiliza. Con los datos del Banco de España, entre enero y marzo de este año en España se han realizado 157 millones de operaciones de retirada de dinero de los cajeros automáticos (en su inmensa mayoría con tarjetas), por valor de 30.110 millones de euros y se ha pagado con el “plástico” en estos tres meses 2.244 millones de veces, por un montante de 64.620 millones de euros.

Los españoles, pues, están muy acostumbrados a tirar de tarjeta para todo tipo de operaciones, incluso para pagos de 1 o 2 euros, práctica extendida tras la pandemia, pues antes, los comercios no solían aceptar desembolsos tan pequeños. Una práctica que mantienen en sus viajes al extranjero, que puede encarecer inesperadamente las vacaciones, según advierte la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).

Tipo de cambio

Así, la organización de defensa de los consumidores advierte de que en países fuera de la zona euro (de otros continentes, pero también de la UE que mantienen su propia moneda, como Bulgaria, Chequia, Dinamarca Hungría, Polonia, Rumanía o Suecia), el uso de la tarjeta suele estar gravado con comisiones que pueden llegar al 3% por cambio de divisa y hasta el 5% por extracción de dinero en el cajero. Es decir, sacar dinero en moneda local puede suponer un sobrecoste de hasta el 8%.

Conviene, pues, antes de salir de vacaciones al extranjero, consultar en la entidad bancaria las comisiones aplicables al uso de la tarjeta en el país de destino. Y si las comisiones que se cobran a nuestras tarjetas en ese país nos parecen excesivas, la OCU recuerda que existen alternativas, como alguna de las cuatro tarjetas sin comisión por cambio de divisa o por extracción en cajero de circulación en España. No obstante, apuntan que algunas están sujetas a limitaciones:

  • ImaginBank, asociada a la Cuenta Imagin. Sin requisitos ni comisiones.
  • Trade Republic, asociada a la cuenta online. Es una tarjeta de débito virtual. Sin comisión por extracción si se sacan más de 100 euros por operación.
  • MyInvestor, asociada a la cuenta remunerada. Sin comisión por extracción por una operación al mes.
  • Revolut, asociada a la cuenta estándar. Cuenta y tarjeta virtual son gratuitas, pero si se quiere tarjeta física hay que pagar gastos de envío. Sin comisión por cambio de divisa hasta 1.000 euros/mes (de lunes a viernes); y sin comisión de extracción por 5 extracciones/mes hasta un máximo total de 200 euros/mes.

Algunas entidades financieras ofrecen los llamados “planes de viaje”. Esta otra opción consiste en pagar una suscripción para evitar el pago de comisiones por cambio de divisa y extracciones en cajeros durante 30 días. Es una suscripción mensual, puede activarse y desactivarse a voluntad del cliente.

Segunda tarjeta

Pero más allá de estas dos consejos, la organización recomienda  en los viajes al extranjero viajar con una segunda tarjeta (por si fallara la que se usa habitualmente), priorizando el uso de la que tenga menos comisiones. También aconseja anotar los números de teléfono del banco, así como del emisor de la tarjeta en el país de destino (Visa y Mastercard) para anularlas en caso de robo o pérdida.

Consejos

Por último, recuerda que, en el caso de que la terminal (TPV) del comercio ofrezca la posibilidad de pagar en euros, se rechace, porque el tipo de cambio suele ser elevado. En resumen, la OCU señala que para que tus pagos en el extranjero sean más seguros y al menor coste posible toma nota:

  • Antes del viaje, comprueba las comisiones por utilización fuera de la zona euro de tus tarjetas. Si las tuyas tienen esa comisión, puedes solicitar alguna de las tarjetas que no cobran nada.
  • Entérate también de lo que te cobran por sacar dinero en el extranjero: hay algunas tarjetas que no cobran nada por hacerlo, una opción a valorar si viajas fuera con frecuencia.
  • Haz números, un cálculo aproximado de lo que vas a gastar y asegúrate de que el límite de la tarjeta es suficiente. Si lo necesitas, estás a tiempo de solicitar a tu banco que amplíe el límite de crédito para no agotar el saldo durante las vacaciones.
  • Es conveniente llevar una segunda tarjeta por si falla la que usas habitualmente.
  • Los cajeros de otros países te pueden cobrar una comisión por su uso, independiente de la que te cobra tu banco. En algunos países el cajero informa en pantalla de la comisión aplicable y es posible cancelar la operación si no nos parece adecuada.
  • Si estás fuera de la zona euro y el cajero o el TPV del comercio te ofrece la posibilidad de realizar el pago en euros, es mejor rechazar esta posibilidad y elegir el pago en la moneda local: el tipo de cambio que aplican en estos casos suele ser muy perjudicial.
  • Las entidades disponen de números de teléfono específicos y generalmente gratuitos para llamar desde el extranjero y anular la tarjeta en caso de robo o pérdida. Es preciso tenerlos anotados, aunque también se puede bloquear la tarjeta directamente desde el móvil a través de la app del banco. Además, Visa y Mastercard también disponen de teléfonos específicos.

Uso fraudulento 

¿Qué pasa cuando se pierde o nos roban una tarjeta, y es utilizada fraudulentamente? Estos son los pasos que dar, según informa el Banco de España. En la copia del contrato han de figurar las obligaciones tanto del titular como de la entidad.

Obligaciones del titular

Obligaciones de la entidad emisora

  • No puede enviarte una tarjeta no solicitada, salvo que sustituya a una anterior.
  • Disponer en todo momento de una forma de comunicación para los casos de pérdida, robo o utilización no autorizada. En cuanto lo comuniques, el banco se hará cargo de cualquier operación posterior a esa comunicación que no hayas realizado tú. De las operaciones anteriores a la comunicación, responderás hasta la cantidad de 50 euros, a no ser que se pruebe que has incurrido en negligencia en la custodia de la tarjeta o de sus elementos de seguridad.
  • Se considera que un titular se comporta negligentemente si no toma medidas razonables para proteger la tarjeta y el número secreto, o si no avisa lo antes posible de la pérdida o robo del documento.