La bolsa española ha iniciado la jornada del martes con una actitud claramente prudente, marcada por la expectación ante una agenda cargada de eventos económicos de calado. El Ibex 35 ha arrancado la sesión con un retroceso del 0,11%, lo que situó al índice en los 14.922 puntos, mostrando así una clara hesitación tras el cierre plano del día anterior. Esta cautela inicial no hizo más que acentuarse durante los primeros minutos de negociación, momento en el que las pérdidas se ampliaron con decisión por encima del 0,2%, llevando al índice a perder, aunque fuera momentáneamente, el simbólico nivel de los 14.900 puntos. Este movimiento refleja una evidente falta de convicción por parte de los inversores, quienes optaron por adoptar una posición de espera.
La jornada se presenta crucial para los mercados, que recuperan una referencia clave con la reapertura de Wall Street tras el parón por el Labour Day. Sin embargo, el foco de atención principal se centra en la publicación, más tarde en la mañana, del dato de inflación (IPC) de la zona euro. Este indicador es fundamental para tratar de anticipar las futuras decisiones de política monetaria del Banco Central Europeo (BCE), en un momento de continua incertidumbre sobre la evolución de los precios y el crecimiento económico.
A nivel nacional, la apertura de los mercados europeos coincidió con la publicación de los datos de empleo en España. Las cifras presentaron un panorama mixto, pero con sombras: el paro registrado experimentó un aumento de 21.905 personas durante el mes de agosto, mientras que la afiliación media a la Seguridad Social sufrió un significativo retroceso de casi 200.000 personas. Este dato estacional, típico del final del verano con la finalización de muchos contratos turísticos, fue no obstante recibido con desánimo, añadiendo presión a la frágil confianza inversora.
En el capítulo de finanzas públicas, el Tesoro Público español tenía previsto celebrar una subasta de letras a seis y doce meses, con el objetivo de captar entre 5.000 y 6.000 millones de euros. Esta emisión, que da el pistoletazo de salida a las operaciones de financiación del mes de septiembre, es observada con interés para medir el apetito de los inversores por la deuda española en el contexto actual de subidas de tipos de interés.
Por el lado corporativo, la compañía de viajes online eDreams ODIGEO aporta un soplo de optimismo al anunciar unos resultados trimestrales extraordinariamente sólidos. La firma registró un beneficio neto de 13,6 millones de euros en su primer trimestre fiscal de 2026 (finalizado el 30 de junio), un resultado que contrasta poderosamente con las pérdidas de 1,2 millones del mismo periodo del año anterior. Este vuelco hacia la rentabilidad vino acompañado de un crecimiento del 8% en sus ingresos, que alcanzaron los 172,6 millones de euros, demostrando una robusta trayectoria de recuperación pospandemia.
La sombra alargada de la política comercial internacional también ha planeado sobre la sesión. Los mercados continuaban digiriendo la noticia de que un tribunal de apelaciones federal de Estados Unidos había dictaminado que la mayoría de los aranceles globales impuestos durante la presidencia de Donald Trump eran ilegales. Si bien esta decisión supone una victoria para los grupos comerciales que impugnaron las medidas, su efecto no será inmediato. La revocación no entrará en vigor hasta el 14 de octubre, lo que concede al Gobierno estadounidense un margen para presentar un recurso de apelación, algo que ya ha anunciado que hará. Esta prolongada incertidumbre mantiene en vilo a las empresas sensibles al comercio global.
En este complejo escenario, la performance individual de los valores del Ibex 35 muestra divergencias desde el campanazo de apertura. Los papeles de Rovi y CaixaBank se han erigido en los líderes alcistas, ambos con una apreciación del 0,42%, seguidos de BBVA (+0,26%) e Indra (+0,23%). Por el contrario, el lado bajista del selectivo estuvo encabezado por Acciona Energía, que se desplomaba casi un 1%. Tras ella, las mayores caídas se las anotaban IAG (-0,59%), Redeia (-0,48%), Enagás (-0,42%) y Telefónica (-0,39%).
El panorama en las otras plazas europeas era mixto, reflejando la misma falta de consenso que en Madrid. Mientras que los índices de Fráncfort y Londres caen un 0,2%, el parqué de París consigue avanzar con firmeza, revalorizándose algo más de un 0,3%. En el mercado de commodities, el petróleo cotiza con ganancias notables. El crudo Brent, de referencia para Europa, escala un 0,8% hasta los 68,68 dólares por barril. Por su parte, el West Texas Intermediate (WTI), referencia estadounidense, sube con aún más fuerza, casi un 0,9%, hasta situarse en los 65,17 dólares. Finalmente, en el mercado de divisas, el euro mantiene una cotización estable frente al dólar, cambiándose a 1,1705 USD. Mientras tanto, la prima de riesgo española muestra una ligera tensión, con el interés exigido al bono español a 10 años avanzando hasta el 3,385%.