Los productores y distribuidores que no apliquen correctamente la supresión del IVA de los productos alimentarios básicos serán sancionados por el Gobierno, dado que el objetivo de esta medida, que también rebaja al 5% el IVA del pan y la pasta, es conseguir que la bajada en el precio de los productos por la supresión del impuesto llegue efectivamente a los clientes y no sea aprovechada por las empresas para incrementar su margen de beneficio.

Así consta en el decreto con las medidas del tercer plan anticrisis aprobado este martes por el consejo de ministros, publicado este miércoles en el BOE. El texto del decreto apunta que se establecerá para ello un sistema de seguimiento de la evolución de los precios y que la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia también podrá controlar el cumplimiento de la medida en el ámbito de sus competencias, pero no entra al detalle de cuáles serán esas sanciones.

El decreto también contiene una novedad relevante respecto al periodo de vigencia de la supresión del IVA anunciada este martes, ya que el Gobierno se ha reservado la opción de acortar la duración de este beneficio y volver a aplicar los tipos anteriores de IVA, del 4% en el caso de los alimentos básicos, si la inflación baja por debajo de un nivel determinado.

En concreto, el decreto establece que, aunque la medida tiene una vigencia inicial de seis meses, en el caso de que la tasa interanual de la inflación subyacente del mes de marzo, publicada en abril, sea inferior al 5,5%, el tipo impositivo aplicable volverá a ser el del 4% a partir del día 1 de mayo de 2023. La inflación subyacente es la que no incorpora el precio de los alimentos y la energía y en noviembre, último dato publicado, se situó en el 3%

La supresión del IVA reducido se aplica a alimentos de primera necesidad como el pan, las harinas panificables, la leche, el queso, los huevos, las frutas, las verduras, las hortalizas, las legumbres, las patatas y los cereales, productos que en algunos casos acumulan subidas anuales de más del 30%. A ellos se suma la bajada del 10% al 5% del tipo aplicable a la pasta o el aceite, que en el caso del de oliva acaba el año en precios máximos tras el alza de los costes de producción, la sequía y los efectos de la guerra en Ucrania.

El decreto obliga a que la reducción del tipo impositivo beneficie “íntegramente” al consumidor, sin que, por tanto, el importe de la reducción pueda dedicarse total o parcialmente a incrementar el margen de beneficio empresarial con el consiguiente aumento de los precios en la cadena de producción, distribución o consumo de los productos.

Ello se aplica sin perjuicio de los “compromisos adicionales” que asuman y publiciten los sectores afectados, por responsabilidad social, de forma que las cadenas de supermercados podrían aplicar beneficios adicionales dentro de su política comercial, tal y como han hecho algunas petroleras con el descuento del carburante que ha estado en vigor en los últimos meses para todos los consumidores.

Respecto a los controles, la vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, ha garantizado que "habrá sanciones" para el sector de la distribución si no repercute en sus precios la rebaja del IVA en alimentos aprobada este martes por el Ejecutivo. La también ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital se ha pronunciado en estos términos en una entrevista en TVE, donde ha insistido en que confía en el sector, ya que "es consciente de que tiene una responsabilidad especial en este momento".

En este sentido, ha recordado que el real decreto ley establece la obligación para los distribuidores de que repercutan esa bajada del IVA de forma positiva en la cesta de la compra y por ello ha remarcado que van a estar "muy vigilantes y muy atentos de que así sea". Ha recordado, además, que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia "va a tener una indicación muy clara de vigilarlo y habrá sanciones si no se cumple". "Confío en que el sector colabore y transmita esta bajada de los precios que va a notarse inmediatamente en los bolsillos de las familias", ha señalado la vicepresidenta primera.

Los supermercados deberán cambiar hasta 5.000 referencias

La supresión del IVA de los alimentos básicos y la reducción al 5 % del aceite y la pasta obligará a las cadenas de supermercados a cambiar los precios de entre 3.000 y 5.000 referencias en apenas tres días.

Así lo ha explicado a EFE el presidente de Aces, Aurelio Pino, quien ha apuntado que los equipos informáticos están trabajando a "tope" para adaptarse a estos nuevos gravámenes de IVA, que entrarán en vigor el próximo 1 de enero y durante seis meses, siempre y cuando la inflación subyacente esté por encima del 5,5 %.

El presidente de ACES -que representa a Alcampo, Carrefour, Eroski y Supercor- ha asegurado que los establecimientos llegarán a tiempo para que los consumidores "paguen lo que tienen que pagar" a partir del 1 de enero.

Del Pino ha precisado que, a pesar de la premura, el sector ha valorado esta medida que va en la línea "adecuada" y que solicitaban desde hace meses para apoyar a un consumidor atosigado por la subida de precios, originada por el incremento de sus propios costes, especialmente los materias primas, la luz y los carburantes.

La patronal Asedas, que engloba a Mercadona, Lidl y DIA, comparte su opinión de que, pese al poco margen de tiempo, se llegará a tiempo.

Su director general, Ignacio García Magarzo, ha aplaudido en un comunicado las medidas del Gobierno que van "en la dirección correcta" para hacer frente a una subida de precios, tras veinte años de "extraordinaria estabilidad de las mismas".

Ha recordado que desde hace un año la distribución había apuntado como solución "rápida" bajar el IVA, como "impuesto inflacionista", por lo que consideran una buena medida la incluida por el Gobierno en su paquete anticrisis para "dedicar parte del exceso de recaudación a ayudar a los consumidores gracias a esta rebaja fiscal".

En cualquier caso, ha precisado que echan en falta que esta rebaja llegara a "otros productos", ya que por ejemplo la carne y el pescado se han quedado fuera de esta reducción.