Los trabajadores de las principales ramas del sector turístico en España han perdido poder adquisitivo en los últimos 5 años, con subidas salariales por debajo del aumento de la inflación, que se ha situado en el 21%.
Las retribuciones de los empleados en tareas del alojamiento o de hostelería son las que se han quedado más por debajo de la subida salarial media; mientras que los trabajadores de las agencias de viaje, aunque también por debajo, obtuvieron un aumento salarial más alto. Al comparar el salario medio de 2024 con el de hace 5 años (2019), este ha aumentado un 17,4%. Esta ganancia se traduce en 294 euros más por mes, es decir, 3.528 euros más al año entre 2019 y 2024.
Entre 2019 y 2024, los sueldos más altos entre las actividades turísticas registradas por el Instituto Nacional de Estadística (INE) se registraron en agencias de viajes y servicios de reservas, que a cierre de 2024 computaban un salario medio bruto anual de 27.704 euros, un 17% por encima de los 23.676 euros de finales de 2019, y se acercaron, por lo tanto, al incremento medio salarial del 17,4%.
Los salarios en estas empresas crecieron algo por debajo de lo que lo hicieron los costes laborales que soportan las agencias y centrales de reservas. La subida del coste laboral total en esta área fue del 18,2%, hasta 38.079 euros de media por persona. Un 27,2% de ese coste total fue a los otros conceptos distintos del salario.
En el sector de hostelería, los salarios alcanzaron al final de 2024 una media de 16.777 euros brutos, un 19% por encima de los 14.100 del cierre de 2019. Es el área de actividad con los salarios más bajos, un 39% inferior a la media de la Clasificación Nacional de Actividades Económicas que recoge el INE. En este caso, la subida salarial creció prácticamente al mismo ritmo que los costes laborales, que lo hicieron un 21,3% y cerraron el año pasado en una media de 20.494 euros. Aquí los costes no salariales representan el 27,5% del total.
Los salarios subieron un 10,2% para los trabajadores del área de alojamientos turísticos, con una media de 20.590 euros brutos anuales al finalizar 2019, y 22.700 euros al cierre de 2024. Aquí los sueldos crecieron algo por debajo de lo que lo hicieron los costes laborales que soportan las empresas (fundamentalmente cotizaciones sociales), que en el mismo periodo aumentaron un 12%. Es decir, el trabajador se lleva a su casa un 71,5% de lo que desembolsa el empleador. El resto se destina a cotizaciones a la Seguridad Social, formación y ayudas sociales, entre otros conceptos.
Más ingresos, menos salario y formación
Desde el sindicato CCOO se denuncia que, en concreto en la hostelería, el incremento del precio de los hoteles no se refleja en los salarios de sus plantillas, ya que en 2024 la subida media fue del 1,4%, mientras que la rentabilidad hotelera se incrementó de media un 6%, según datos sindicales. Si se mide en términos de ingreso medio por habitación disponible (RevPar), que es el indicador que mejor aproxima la rentabilidad porque tiene en cuenta también la ocupación, el incremento de precios de los hoteles ha sido superior al 40%.
Además, la hostelería es también el sector que menores recursos dedicó a formación profesional, con 22,8 euros por persona, frente a los 78,3 euros de media en el conjunto de la actividad. Lo mismo ocurre con el gasto en beneficios sociales, donde la hostelería queda en la parte más baja de la tabla, con 209,7 euros, menos de la mitad que la media general (518,5 euros).