Uno de los temas que salió en la mesa posterior del Auto Mobility Trends de esta semana celebrada en Barcelona, fue la necesidad de mano de obra, más allá de la falta de materias primas, que todavía la industria sufre. Así pues, las mercancías siguen llegando a tiempo, a pesar de la última crisis en el mar Rojo que obliga a desviar el tráfico marítimo hacia Sudáfrica, pero hay un mal endémico mayor que afecta al sector.
De entrada, la falta de mano de obra cualificada en el sector de la formación profesional que diferentes patronales, como Foment, Pimec o la misma UPM, llevan avisando desde hace tiempo. De la otra, cómo el incremento del transporte con especial interés por la última milla, ha generado una nueva necesidad: tener conductores de camiones y furgonetas que puedan cumplir con las demandas de un comercio online cada vez más al alza.
Los convenios de los camioneros siempre han estado presentes en este tipo de crisis cíclicas. A modo de ejemplo, en el Reino Unido se necesitó la inyección de este perfil de trabajador procedente de los países del este de Europa porque el oficio, aparte de sacrificado, estaba mal remunerado. Entrar a fondo en los problemas que comportan a los países desarrollados de la UE que no cuenten con chóferes acreditados, pueden ser diversos. En España, el Gobierno de Pedro Sánchez acaba de lanzar una excepción insólita: que un conductor con el carnet de conducir de Marruecos no tenga que hacer ningún tipo de trámite por convalidar que es apto para conducir por las carreteras y autopistas españolas.
"No se puede equiparar la formación"
La polémica acaba de empezar. Los conductores consideran que, todavía más, empobrecen su oficio ante un perfil de trabajador que no requerirá de los derechos por los que ahora están luchando. De la otra, las mismas autoescuelas, las cuales acaban de hacer pública su posicionamento a través de la Confederación Nacional de Autoescuelas Españolas (CNAE) porque "no consideran razonable equiparar la formación de un conductor marroquí con un español sin hacer una formación complementaria. Y añaden: "La flexibilización para el cambio del permiso de conducir con Marruecos no obedece a la mejora experimentada por este país en materia de seguridad vial, sino a razones puramente laborales, con el fin de resolver la escasez de conductores profesionales que existe a nuestro país".
Por otra parte, la diferencia entre la conducción y la tecnología de ambos países tiene diferencias significativas: "Las nuevas tecnologías y los sistemas de ayuda a la conducción (ADAS) embarcados en los vehículos que se conducen en España son infinitamente más modernos que los utilizados en Marruecos. Hace falta tener en cuenta que en Marruecos no solo no existen las ayudas a la conducción activas ADAS, que evitan accidentes gracias a sistemas como detectores de ángulo muerto o sistemas de frenazo de emergencia, sino que además en Marruecos actualmente el tacógrafo ni siquiera es obligatorio", alerta la CNAE.
Alud de demandas para convalidar el carné
En último término, los gestores también cuestionan una medida como esta. Plinio Gómez, miembro de la Junta de Gobierno del Colegio de Gestores Administrativos de Catalunya, así como Ponente de la Comisión de Tráfico, constata esta tendencia actual de necesidad de adherir nuevos conductores fuera de aquí: "Recientemente, estamos tramitando y en muchos sectores, diferentes admisiones de carnets de conducir extranjeros derivados de cuando se tiene el permiso de residencia para un extranjero que viene a vivir y trabajar aquí. A la vez, el sector de la automoción requiere también de mano de obra que se busca, precisamente, en este perfil de personas, y hay que gestionar toda la tramitación para poder dar respuesta a la demanda de la empresa y del trabajador. Y en este caso, la demanda también se puede extender a muchos otros sectores". Una demanda sin embargo, que la gestión que se haga de esta puede ser clave para entender si se puede derivar a un conflicto de gran escala.