Seguro que conoces la plataforma Casablanca; que llegó a producir 45.000 barriles diarios a principios de los 80, cesó su producción en 2021 y está ahora pendiente de desmantelar; pero esta instalación situada mar adentro a 44 kilómetros de la costa de la provincia de Tarragona no es la única explotación petrolífera rentable que ha funcionado en España: en Burgos, y desde 1967 hasta 2017, funcionó un campo petrolífero en Ayoluengo, localidad de la comarca de La Lora. Durante los cuarenta años de labores se han llegado a extraer 18 millones de barriles, que parece mucho pero queda en nada si pensamos que en España se consumen más de 1.500 barriles diarios. Además, el petróleo burgalés no se podía refinar para obtener carburantes.

Sargentes de la Lora
Sargentes de la Lora

Hasta 400 trabajadores

La concesión para explotar el campo petrolífero de Ayoluengo se concedió en 1967 y de ella se encargó en inicio una filial de Standard Oil y Texaco, En los primeros años, se obtenían hasta 5.000 barriles diarios, suficiente para cubrir la demanda nacional actual e, incluso, exportar, pero pronto llegaron los problemas: el crudo de Ayoluengo contenía demasiado vanadio, lo que hacía imposible su refino para obtener carburantes. Durante los primeros años, hasta 400 personas trabajaron en el yacimiento y la construcción de las infraestructuras necesarias, pero ni Ayoluengo ni Sargentes de la Lora, las localidades más próximas al campo petrolífero, dejaron de ser lo que eran: pequeñas poblaciones rurales. De hecho, de los más de 800 habitantes que estaban censados en el municipio, hoy quedan sólo 144.

Museo del Petróleo
Museo del Petróleo

Hoy es un museo

La explotación del yacimiento finalizó en 2017 y perviven una docena de las 53 bombas extractoras que llegaron a funcionar. Tras el final de las labores, el campo petrolífero fue declarado Bien de Interés Cultural en la categoría de Conjunto Etnológico por la implicación socioeconómica que llegó a tener. En Sargentes de la Lora existe hoy un pequeño museo, el Museo del Petróleo, en el que se explica la historia del sueño americano que se vivió en La Lora, a 70 kilómetros de Burgos, hace 50 años y que finalizó en 2017. La de Burgos, con todo, no es la única explotación petrolífera terrestre del país, ya que, a principios del siglo XX dos ingenieros franceses perforaron en Guardiola de Berguedà, muy cerca de las minas de carbón de Cercs, la que se convertiría en la primera explotación subterránea de petróleo de España: la Mina de Petróleo de Riutort. Al localizar unas capas de margas bituminosas que afloraban al exterior, se excavaron unos 350 metros de galería que, durante 12 años, permitieron obtener unas 500 toneladas de petróleo. La instalación se abandonó y hoy también es visitable, pero su valor no va más allá de la mera anécdota en una cuenca minera, la del Berguedà, que fue famosa por sus lignitos, explotados hasta 1991.

Mina Petróleo Riutort
Mina Petróleo Riutort