La guerra en Ucrania dista mucho de ser el paseo militar que Rusia pensaba y, por eso, el Ejército Ruso se emplea a fondo para desarrollar nuevas armas con las que intentar desencallar un conflicto que va camino de convertirse para Putin el mismo principio del fin que Afganistán representó para los jerarcas soviéticos. De momento, el siguiente invento que van a probar en los campos de batalla ucranianos se llama Marker y combina dos tecnologías: robótica e IA. ¿Servirán para hacer frente a los Leopard que va a enviar Occidente?

marker vehiculo ruso militar
 

¿Qué es?

El Marker, que se define como una plataforma robótica de combate, es un vehículo terrestre no tripulado equipado con ametralladoras de 7,62x54 milímetros y dos proyectores de misiles antitanque. Los rusos lo han probado ya como parte del sistema de seguridad del cosmódromo Vostochni, muy cerca de la costa rusa del Pacífico y la frontera con China. Ahora, pretenden usarlo en el Donbass.

Tres días de autonomía

El vehículo cuenta con sistemas de IA que le permiten que reconocer de objetos y funcionar de manera autónoma durante un máximo de tres días. Identifica y destruye objetivos situados dentro de un radio de 15 km y es capaz hasta de medir la potencia de fuego de sus adversarios. Además, elabora mapas del terreno por el que circula de manera automática.  Las primeras pruebas con el vehículo datan de 2019 y la intención de Putin y sus asesores militares es que entre en combate de manera prácticamente inmediata. La guerra, cada vez, se parece más a una película de ciencia ficción, pero todavía queda una diferencia: esta vez, por muy impresionantes que nos parezcan los robots, los muertos son de verdad.