Mientras que el aceite de oliva llega a máximos históricos y todo indica que la escalada no va a detenerse porque la sequía reduce producciones, los aceites vegetales (soja, coza y girasol) acumulan cinco meses de bajada de precios. Sólo en anril, disminuyeron de media un 1,3%

Aceite de girasol
 

¿Y la dieta mediterránea?

El dato es especialmente preocupante para países en los que, como en España, el aceite de oliv es pieza clave de la dieta y llega a considerarse casi garantía de salud. La evolución al alza de los precios del aceite en origen que ocasiona la sequía y las altas temperaturas que se han registrado en las épocas de floración de los olivos y cuajado de fruto permiten avanzar nuevas subidas en los puntos de venta. El virgen extra costaba ya casi 6,50 euros por litro en los supermercados y los precios en origen han subido durante este último mes un 11%, así que es fácil hacer previsiones. ¿Veremos aceite de oliva de marca blanca a más de ocho euros el litro antes de acabar el año? Todo indica que sí y eso hará que la dieta mediterránea sea cada vez más cara. El aceite de orujo se confirma como alternativa y el de girasol, también. El de colza, por la mala prensa que arrastra en España, se reserva para usos no domésticos.

olvia
 

¿Cambios en las costumbres?

Entre los aceites vegetales, el más consumido en España es el de girasol, que se vende a entre uno y dos euros el litro en función de la marca. De hecho, es posible encontrar marcas que lo venden a 1,05 euros. Por supuesto, el aceite de girasol también tiene ventajas nutricionales como, por ejemplo, sus propiedades antioxidantes, que se derivan de su alto contenido en vitamina E. Si los precios siguen así, es posible que veamos pronto cambios en las costumbres culinarias españolas. Hasta la mantequilla, si se escoge marca blanca, puede acabar siendo más barata que el aceite. Las freidoras de aire han sido el regalo estrella de este Día de la Madre.