La impresión 3D sigue ganando terreno en cuanto a las aplicaciones que este tipo de impresiones pueden llegar a tener.

En la actualidad existe la posibilidad de que a través de ultrasonidos y las impresoras 3D se puedan fabricar implantes dentro del cuerpo.

Al parecer este tipo de implante se forma y solidifica dentro del cuerpo y lo activarían con ondas de ultrasonidos.

La impresión directa de sonido (DSP)

El uso de la impresión 3D en la salud no es algo nuevo, en España ya hay hospitales que recurren a ella para la fabricación de estructuras anatómicas.

El tema es que hasta el momento el método era fabricar el objeto y luego someter a la persona a una intervención quirúrgica para poder colocar el implante.

La impresión directa de sonido está en desarrollo
La impresión directa de sonido está en desarrollo

Pero según investigadores de la Universidad Concordia de Canadá, este proceso va a cambiar, ya que están trabajando en un sistema para lograr imprimir piezas usando ondas ultrasonido como el que usan para ecografías.

La idea es que estas ondas pasen a través de paredes metálicas, piel o músculo y puedan actuar sobre un material líquido y convertirlo en sólido dentro de una cavidad, esto eliminaría el tener que someter al paciente a una operación invasiva y arriesgada.

En la actualidad, las ondas ultrasónicas son utilizadas para procedimientos destructivos de tejidos y tumores. Sin embargo, los investigadores han pensado en porque no emplear esta técnica para crear cosas buenas.

En el caso de los implantes, las ondas provocan una presión fluctuante dentro de las pequeñas burbujas del polímero líquido. Esta presión genera reacciones químicas que son las sirven para transformar la resina líquida en sólido o semisólido dependiendo del implante que se necesite.

Los investigadores han indicado que si se usa cierto tipo de ultrasonido con cierta frecuencia y potencia, son capaces de crear regiones químicamente reactivas localizadas.

Esta técnica consiste en elevar la temperatura para poder generar el implante, pero sin afectar los tejidos biológicos colindantes en la zona.

En la actualidad, el proyecto sigue a prueba, pero de lograrse resultados concluyentes y positivos, este sería un gran avance para la medicina en los últimos años. Lo que se traduce en muy buenas noticias para aquellos que requieren de implantes.