Es lunes; has madrugado, el fin de semana te ha sabido a poco, solo llevas un café en el cuerpo y te dispones a trabajar. ¿Hay algo peor que queden unos cuantos días hasta que vuelva a ser viernes? Sí, que cuando has levantado la tapa del ordenador y pulsado el botón de encendido, este no responde.
Que el portátil no encienda despierta una gran ansiedad y preocupación en nosotros. Es una de las grandes «catástrofes» de la tecnología. Son dispositivos que albergan información personal y laboral muy importante; sin ellos, millones de personas en todo el mundo no pueden desarrollar su trabajo.
Antes de que marques el número de teléfono del servicio técnico de la marca o pongas las manos en el volante para ir a la tienda donde lo compraste, te proponemos algunas cosas que puedes hacer para intentar arreglarlo por tu cuenta, para que te sientas como un auténtico informático.
Posibles soluciones a un ordenador portátil que no enciende
- Revisar lo básico: a veces, los problemas aparentemente graves se deben a algo sencillo. Comprueba si la batería tiene carga. Para ello, conéctalo al enchufe con su adaptador y verifica si el LED de carga se activa. Deja pasar unos minutos y vuelve a pulsar el botón. Si sigue sin reaccionar, prueba a quitarle la batería y a encenderlo solo con el cargador. Si tu portátil es relativamente actual, puede que esté integrada y no sea posible quitarla.
- Haz un reinicio forzado: desconecta todos los elementos posibles (batería, cargador, periféricos USB, etc.) y mantén pulsado el botón de encendido durante 30 segundos. Vuelve a conectar el cargador y trata de encenderlo.
- Escucha con atención: si las luces del ordenador se encienden y el ventilador está activado, pero la pantalla continúa oscura, entonces el problema es el panel. Prueba a conectar un monitor externo por HDMI, VGA o la conexión de la que disponga tu equipo para descubrir si muestra imagen.
Si después de haber probado estas posibles soluciones el ordenador continúa sin mostrar imagen, entonces hay un problema de hardware. Lo mejor es que acudas al servicio técnico, ya que ellos son los expertos y sabrán con relativa rapidez cuál es el fallo y qué se puede hacer para arreglarlo. A veces, el arreglo es más caro que adquirir un nuevo equipo.
También puede darse el caso de que el ordenador portátil se encienda, pero que después de un tiempo determinado se apague. Si no es porque la batería carezca de carga, puede deberse tanto a un problema de hardware como de software. Algo que nosotros, como usuarios, podemos intentar hacer, es un mantenimiento físico.
Si tu ordenador portátil lo permite, ábrelo y límpialo a fondo con la ayuda de una brocha y bote de aire comprimido, prestando especialmente atención al ventilador. La suciedad puede provocar que el equipo se apague debido al sobrecalentamiento. Un ventilador limpio es muy importante, y los usuarios domésticos no suelen saber que hay que mantenerlo en buen estado para evitar problemas.
También puede darse el caso de que se te haya caído el ordenador portátil al suelo o que le hayas dado un golpe relativamente fuerte. Si bien en apariencia puede parecer que está en perfecto estado, internamente ha podido sufrir un daño que le impida encenderse. En este caso, el servicio técnico es tu mejor aliado.