Diez años después de que Grindr saliera al mercado por primera vez, el 25 de marzo de 2009, la app de citas más famosa e importante destinada al universo gay, no pasa por sus mejores momentos. Tanto es así, que sus dueños estarían buscando compradores.

Grindr fue creada en 2009 por Joel Simkhai, un empresario israelí con residencia en el estado de Nueva York en los Estados Unidos, y fue ideada para que los homosexuales de un entorno cercano pudieran conocerse de manera sencilla y discreta.

Hoy en día Grindr presume de contar con más de cuatro millones de usuarios activos cada día y un total de 27 millones registrados en cerca de 200 países. Pero como ocurre con aplicaciones con un número tan elevado de participantes, no todo ha sido un camino de rosas para Grindr. Desde un principio comenzaron a darse mensajes abusivos y se filtraron también en internet fotografías comprometedoras procedentes de la app, entre otras prácticas irregulares. Asimismo, en 2012 se filtraron datos personales de cientos de miles de usuarios y en 2018 un fallo de seguridad permitió rastrear a usuarios en tiempo real con una precisión de hasta cinco metros.

Así y todo, Grindr lleva años procurando momentos muy felices a muchos de sus usuarios y esa es una de las principales razones por las que una década después de que saliera en la App Store, siga siendo la número uno de su segmento.

Como ha ocurrido con otras muchas apps veteranas, su aspecto y sus funcionalidades ha ido evolucionando con el paso del tiempo y hoy no es solo un lugar de encuentro o de citas, sino que otros aspectos como la música y el entretenimiento forman parte primordial de su oferta.

Hace poco más de un año, en enero de 2018, Joel Simkhai dejaba Grindr después de que el grupo empresarial chino Kunlun comprara la compañía por 245 millones de dólares. El cambio de propietarios causó una cierta preocupación entre algunos de los usuarios de la aplicación y desde Kunlun aseguraron que la privacidad de Grindr y sus miembros no solo se iba a convertir en una de sus mayores prioridades sino que sus datos iban a continuar almacenándose en los Estados Unidos.

Pero ahora que Grindr acaba de celebrar su décimo aniversario en el mercado, las autoridades de los EE. UU. han expresado su preocupación acerca de que la app pueda afectar a la seguridad nacional estadounidense. Este aspecto ha provocado que, al parecer, la compañía china Kunlun –que continúa manteniendo la ciudad de Los Ángeles como sede de Grindr– se sienta acosada por la Administración norteamericana y haya decidido poner la compañía a la venta, según informa la agencia de noticias Reuters. Una circunstancia que ya ha puesto en alerta a sus usuarios por si un futuro cambio de propietarios pudiera afectar a la aplicación tal y como se la conoce hoy en día.