Grandes compañías de tecnología como Google, Amazon o Apple se han lanzado a dominar el novedoso, y todavía incipente, mercado de los asistentes personales. El mismo Elon Musk, creador de los famosos coches eléctricos Tesla, quiere ir un paso más allá con su compañía Neuralink, con la que pretende conectar ordenadores con cerebros humanos a través de implantes en los mismos. Pero mientras se van desarrollando todos estos proyectos, un estudiante postdoctoral de la prestigiosa universidad norteamericana MIT ha sorprendido a todos con un prototipo que ha creado él mismo y que sirve para dar órdenes sin necesidad de decir ni una palabra y obtener respuesta.

Qué es AlterEgo

El talentoso joven se llama Arnav Kapur y ha creado un dispositivo al que ha bautizado como AlterEgo. Un ingenio que recuerda un poco a los micrófonos que algunas estrellas de la canción llevan en concierto, que se engancha en la oreja y llega hasta la boca. De color blanco y con un aspecto que es estéticamente mejorable, lo más importante, sin duda, es lo que es capaz de hacer.

Ahora mismo AlterEgo es el dispositivo que más ha conseguido acercarse a la tecnología de lectura mental. A pesar de que no lee las señales eléctricas del cerebro, permite hacer preguntas a la máquina sin necesidad alguna de pronunciar palabra. Tras la pregunta, recibe la respuesta a través de la tecnología bone-conduction (o de conducción ósea, es decir, a través de su conexión superficial con el cráneo).

AlterEgo permite también que una persona que –por la razón que fuera– no pueda hablar, pueda utilizar el sistema ideado por Kapur para dictar palabras y que así un ordenador las lea.

Múltiples posibilidades a futuro

El desarrollo a futuro del dispositivo AlterEgo permite pensar en casi tantas aplicaciones como uno pueda imaginarse. Sin necesidad de que el usuario pronuncie palabra alguna, seguramente podría aprovecharse del sistema para saber qué temperatura va a hacer en la ciudad a la que se desplace al día siguiente, pensar una frase en un idioma y que AlterEgo se la traduzca a otro idioma si está en otro país y así poder mantener una conversación con un extranjero o conocer la respuesta a preguntas que alguien le haga y él a su vez se las haga al dispositivo para poder así contestar correctamente sobre la información requerida.

Otros campos en los que se piensa que podrá ayudar son aquellos que tienen que ver con enfermedades de la mente como el Alzheimer, el Parkinson, la ELA, la parálisis cerebral o tantas otras.

En palabras del propio Kapur, “el sistema es capaz de capturar la activación neurológica sutil de los sistemas de habla internos desde la superficie de la piel, pese a que la fuente de la señal está en el interior”.