Los drones sirven para casi todo: desde transportar botiquines a detectar explosivos o, incluso, levantar atestados o, al menos, ayudar a hacerlo, porque eso es, siempre, responsabilidad de un agente de la autoridad. Sea como fuere, lo cierto es que España lidera la innovación mediante drones en el ámbito de las soluciones para emergencias. Y una empresa de Pontevedra tiene mucho que ver.

Dron de rescate
Dron de rescate

Punta de lanza

Se llama Aerocámaras, está en Lalín (Pontevedra), funciona desde hace 15 años y da empleo a un centenar de personas. De ella dicen que es la punta de lanza de un sector en desarrollo que coloca a España a la vanguardia de la innovación en ámbitos tan dispares como la seguridad, las técnicas de rescate, la topografía, la agricultura o el audiovisual. Todo, sin embargo, tiene un denominador común: el uso de sistemas con peso inferior a 5 kg que puedan ser portados por vehículos aéreos no tripulados.

Múltiples ejemplos

Este tipo de sistemas permiten, por ejemplo localizar a personas desaparecidas en áreas de difícil acceso o barcos con problemas y, mientras los equipos de rescate llegan, suministrar agua y alimentos a los accidentados. En este tipo de acciones, se precisan drones con cámara térmica y zoom para la localización y con cierta capacidad de carga. No es, sin embargo, el único uso: las mismas cámaras térmicas que localizan personas, pueden localizar también materiales susceptibles de ser explosivos y, con el uso de una pinzas de precisión, retirarlos y explosionarlos en el aire o en espacios controlados para evitar daños. La cámara, también puede servir de ayuda para levantar atestados en siniestros.

Usos forestales

El abanico de posibilidades incluye también usos forestales, ya que un dron puede identificar desde el aire espacios susceptibles de ser repoblados y, después, esparcir semillas. Del mismo modo, son un aliado excepcional para sembrar grandes extensiones de tierra abaratando costes. Por último, en Aerocámaras han desarrollado también drones más grandes que pueden llegar a transportar hasta 8 kilos de carga. Todo esto llevan presentándolo desde hace meses en diferentes ferias, la última de las cuales tuvo lugar en Sevilla. Y, por si todo esto te parece difícil pero, como a muchos, te fascina, no te preocupes: disponen hasta de una escuela propia y han formado, dicen ellos, hasta 30.000 alumnos. Con lo único que no tienen nada que ver, eso sí, es con los drones iraníes que maneja Putin. En lo demás, se atreven con todo.