Una de las principales preocupaciones de los usuarios a la hora de dar el salto de la gasolina a la electricidad en los vehículos es la batería. Hay «miedo» a que la autonomía no cumpla las expectativas y no alcance el mismo número de kilómetros que los convencionales. También hay temor a que se incendien o exploten mientras los usuarios están en su interior o alrededores, provocando graves daños y hasta la muerte.
Los fabricantes de vehículos eléctricos chinos son conscientes de las dudas de los consumidores, y por eso están invirtiendo mucho dinero en mejorar las baterías. El país asiático ha lanzado una nueva normativa de seguridad que prohíbe que se incendien o exploten durante, al menos, dos horas, incluso habiendo fuga térmica. Aunque entrará en vigor el 1 de julio de 2026, ya hay una marca que ha lanzado la primera batería “sin fuego y sin explosiones”.
China se está comiendo el mercado de vehículos eléctricos a nivel internacional por sus coches de buena relación calidad-precio y prestaciones a la última. En Australia ya han superado en ventas a los Tesla de Elon Musk. Sin embargo, los fabricantes “de toda la vida” no quieren quedarse atrás, y por eso la nueva batería de estado sólido de BMW amplía mucho la autonomía.
Una batería con celdas más compactas y mayor densidad energética para autonomía de gran duración
El grupo BMW está probando una nueva generación de tecnología de baterías en su BMW i7. El objetivo es lograr un mejor almacenamiento de energía para ofrecer una mayor autonomía de conducción. La clave de la innovación es que es una batería de estado sólido (ASSB) pura y de gran formato suministrada por Solid Power. A diferencia de otras baterías, las de estado sólido prometen una mayor densidad energética en un encapsulado más pequeño y ligero que las de iones de litio actuales.
BMW y Solid Power llevan colaborando desde 2022 en el desarrollo de la tecnología ASSB. Este tipo de baterías sustituye los electrolitos líquidos o en gel presentes en las celdas de iones de litio convencionales por un electrolito sólido a base de de sulfuro, lo que permite celdas más compactas y con mayor densidad energética.
Este nuevo tipo de baterías permite que los vehículos almacenen más potencia sin añadir peso, mejorando así la autonomía y la eficiencia. Se está probando en el BMW i7 en Múnich para ver su rendimiento en la vida real. John Van Scoter, presidente y director ejecutivo de Solid Power, ha comentado lo siguiente:
En Solid Power nos enorgullece enormemente que nuestra colaboración con BMW haya dado como resultado la primera demostración de celdas de batería de estado sólido en un vehículo. Creemos en la promesa de las baterías ASSB y seguimos impulsando la innovación de nuestro electrolito de sulfuro para apoyar ese futuro de los vehículos eléctricos
Martin Schuster, vicepresidente de celdas de batería y módulos de celdas del Grupo BMW, ha destacado que “nuestro vehículo de prueba, el BMW i7 ASSB, en carretera es un ejemplo perfecto de la mentalidad abierta a la tecnología del grupo BMW. Impulsamos continuamente el desarrollo de nuevas tecnologías de celdas de batería y ampliamos constantemente nuestros conocimientos con socios valiosos como Solid Power”.