Anda el ministro Escrivá muy ufano estos días convencido de que, durante el presente mandato, ha podido con los dos Miuras que más temía: la cuota de autónomos y las pensiones. Sobre el segundo, no conviene extenderse en demasía, porque hay quien ya da por hecho que su reforma sólo aplaza los problemas pero, acerca del primero, haría bien en tomar nota de lo que opinan los autónomos de a pie, que no suelen ser los que se agrupan en entidades y asociaciones porque, cuando se hace uno autónomo, lo de afiliarse aquí y allá se deja para más adelante. Los autónomos freelance, cuyo número ha crecido de manera exponencial en los últimos años al socayo, en gran parte de Internet y otras tecnologías, lo tienen claro: el 61% de los 10.000 profesionales a los que Shakers, plataforma tecnológica que conecta a freelance y proyectos, cree que el nuevo sistema de cuotas nueva cuotas no beneficia al ecosistema y el 85% piensa que habría mucha más gente siendo freelance si no existiese la cuota.
Un 16% de autónomos
En España tenemos un 16% de autónomos y, por tanto, somos uno de los países con más tradición de trabajo por cuenta propia a pesar de que el sistema económico y las administraciones siguen sin impulsar a esta modalidad de desempeño profesional. La cuota de autónomos, concluyen desde Shakers a partir de los datos recabados en la encuesta que han completado, “pertenece a un sistema laboral que está obsoleto y que no representa ni las necesidades de las empresas que contratan ni las de los profesionales que se forman y buscan alternativas al empleo por cuenta ajena profesional”.
Héctor Mata, director ejecutivo de la plataforma, es claro: “Todos hablamos de un movimiento de freelance creciente y de la agilidad y la flexibilidad que suponen los freelance para un mercado laboral mucho más cambiante que antes, y es una realidad que convive con otra muy distinta: la legislación no acompaña a que los freelance tengan un contexto favorable para desarrollar su trabajo. Además, no olvidemos que muchos autónomos son empresarios y generan empleos, así que la cuota también está minando esa posibilidad” .
Distintas voces, conclusiones parecidas
Los nuevos rangos para la cuota de autónomos, detallan desde Shakers, “sólo tienen en cuenta la facturación total de un mes, un número que es poco representativo de la realidad de los profesionales, quiénes además suelen tener picos y valles de trabajo, de manera que la aportación no es regular e implica más burocracia para modificarla”. En Tax Down, start-up digital de gestión de finanzas, también han hecho una encuesta: “Según el barómetro que lanzamos hace unas semanas en TaxDown sobre la situación de los autónomos españoles, el 81% de ellos considera que las nuevas cuotas no son beneficiosas para el sector, el 50% añadía que no se han tenido en cuenta las necesidades reales de los autónomos y un 18% las calificaba como injustas porque llegan en un momento de extrema inestabilidad para el colectivo” explica Valeria Hernández, responsable del área de autónomos de TaxDown.
Riesgo de sanciones
El nuevo sistema del que tan ufano presume Escrivá impide, además, que el autónomo pueda escoger libremente su base de cotización y obliga a pagar una cuota u otra en función de los ingresos previstos. De hecho, y según explica la abogada especialista en Derecho de Familia Alejandra Zapata, “si el autónomo no informa a la Seguridad Social cuando cambian sus rendimientos, puede ser sancionado”. Con todo, el más claro es Carlos Martínez, emprendedor incluido por la revista Forbes en la lista de los 100 jóvenes más creativos: “desde mi punto de vista, es injusto tener que pagar por trabajar, es decir, no tiene ningún sentido tener que pagar una cuota fija (bastante alta) sin ni siquiera saber cuánto vas a facturar. Desde el día uno estas generando unos gastos fijos que mucha gente no está dispuesta a asumir por si sale mal. Creo que la mejor fórmula sería una cuota simbólica (20-50€/mes) y un % de los ingresos. Además, premiará a los que facturen más con ciertos beneficios para evitar la economía sumergida y animar a la gente a que declare el 100% de sus ingresos. Pienso que, con esto, mucha más gente emprendería en España y gracias a la creación de empleos y riqueza se recaudaría incluso más que con la actual cuota de autónomos”.