Los vendedores de lotería quieren que el precio del décimo del sorteo de Navidad, que se celebra año tras año el 22 de diciembre, aumente y pase de costar 20 euros a 25. Así lo han trasladado este martes la Agrupación Nacional de Asociaciones Provinciales de Administradores de Loterías (ANAPAL) a la Sociedad Estatal de Loterías y Apuestas del Estado (SELAE), equiparando su comisión con la del resto de sorteos, del 4,5 al 6%. Cada vez es más habitual que los ciudadanos compren sus billetes de lotería a través de las páginas web oficiales, en lugar de ir hasta las administraciones presencialmente, ya que así tienen más posibilidades a la hora de elegir su número de la suerte. Este hecho tiene un impacto sobre los billeteros, ya que como ha alertado el presidente de la ANAPAL, Borja Muñiz, la rentabilidad de los puntos de venta está en riesgo a causa de la reducción de público. Asimismo, también han propuesto un cambio muy relevante, ya que han planteado que el Gordo, el primer premio de la lotería de Navidad, pase de 400.000 por décimo a 500.000, ajustándolo a la inflación. Este aumento, defienden los vendedores de lotería, debería aplicarse de manera proporcional al resto de premios.

Según indican desde la ANAPAL, el 52,7% de los vendedores de lotería afirma que sus beneficios han disminuido en los últimos años, mientras que solo un 8,1% celebra que ha tenido un aumento de ventas. El 40,3% mantiene sus ingresos estable, pero el colectivo cree que esta estabilidad "no siempre supone una situación económica real de equilibrio". "Todo ha subido mucho de precio, pero nuestro producto no. Necesitamos una subida tanto de precio como de premio", ha defendido Muñiz en declaraciones a RTVE, instinto en que no es lo mismo lo que puede comprar una persona con 400.000 euros hoy que hace veinte años.