Las negociaciones entre los sindicatos del sector educativo y el Departamento de Educacióse encallan en la reducción de una hora lectiva en el curso 2022-2023. El fracaso del diálogo entre los actores implicados se traduce en una nueva jornada de huelga de los docentes, la cual será la detrás del actual curso escolar, pero no se descartan nuevas convocatorias el próximo curso. Así pues, después de no acercar posiciones con Educación, los sindicatos han denunciado el inmovilismo del Departamento y se preparan para un día de movilizaciones que van desde piquetes en diferentes puntos de Barcelona y la red viaria como con una manifestación. En las primeres horas de este jueves ya se han cortado los laterales de la Gran Vía a la altura de la Campana.

Los sindicatos llegan desgastados a esta última convocatoria del curso, ya que las diversas movilizaciones han ido teniendo menos participación y las negociaciones no han avanzado como esperaban. La de este jueves será la nueva convocatoria de huelga del sector desde marzo. Los sindicatos han convocado a las 11:30 horas una manifestación a Plaça Universitat.

Sin acuerdos

En un comunicado conjunto, los sindicatos indican que el equipo del conseller Josep González Cambray presentó una propuesta que planteaba reducir una hora lectiva tanto a primaria como secundaria el curso 2023-24, extremo que en la propuesta anterior solo se aplicaba a primaria, dejando la de secundaria para el curso siguiente. Los sindicatos lo consideraron insuficiente y exigieron que la reducción se aplique el curso 2022-23. Ambas partes se emplazaron a volver a encontrarse el miércoles, pero la reunión no ha servido para llegar a ningún acuerdo.

En el comunicado, los sindicatos lamentan que, a la reunión de esta tarde, la Administración "no ha aportado ningún cambio" en relación con la propuesta presentada el miércoles. "No han mostrado en absoluto ninguna intención real de poner las bases para llegar a un acuerdo digno con el colectivo", añade. Aparte, la parte sindical lamenta que las opciones "que no representan un impacto económico, como el plan de estabilidad, el currículum, el calendario, el blindaje de julio o el decreto de plantillas, ni son ni se han puesto en ningún momento sobre el papel".

Delante de este escenario, los sindicatos alertan de un inicio de curso "sin ninguna normalidad" y exigen, para seguir negociando, "nuevas propuestas, previas a las reuniones y por escrito, que puedan desencallar el conflicto".

Protestas en el Parlament

El malestar de los docentes no se ha expresado solo en las calles estos meses. El pasado miércoles, unos cuantos representantes sindicales asistieron al pleno del Parlament y mostraron unas pancartas contra el conseller Cambray. Los docentes pedían la dimisión del conseller con una pancarta que ha sido habitual en las manifestaciones de maestros y profesores de los últimos meses 'Bye, bye, Cambray.'