Los alojamientos de la costa metropolitana y la ciudad de Barcelona han dado por alcanzadas y, en más de un caso, por superadas, las expectativas de ocupación durante la Semana Santa. El buen tiempo y las temperaturas elevadas que ha habido entre el Jueves Santo y Lunes de Pascua han sido determinantes para impulsar la actividad turística.

En Barcelona, las reservas han llegado el 85%, mientras que los campings de la demarcación han rozado el pleno. En el Maresme, los hoteles han registrado una ocupación del 92%, y en Sitges se han agotado las plazas de los hoteles del núcleo urbano. El sector valora "muy satisfactoriamente" las cifras de esta Semana Santa y destaca de forma especial la cantidad de reservas de última hora y el elevado número de visitantes de un solo día, que han llenado bares y restaurantes.

En la costa del Garraf, el Gremio de Hosteleria de Sitges cierra la Semana Santa haciendo una valoración "muy satisfactoria", tanto por la ocupación hotelera como, sobre todo, por el volumen de visitantes que ha acogido el municipio. El presidente del gremio, Joan Anton Matas, ha explicado que los hoteles han superado las expectativas que fijaban un 95% de plazas reservadas.

Finalmente, se ha alcanzado una ocupación de entre el 97 y el 100% durante los cuatro días fuertes, muy por encima del 85% registrado el año pasado. Con todo, el elemento diferencial de este año ha sido la llegada de visitantes, que ha "desbordado" las previsiones.

Gran volumen

Matas ha señalado el buen tiempo como el "factor clave" para explicar el gran volumen de gente que ha llenado los restaurantes y las playas sin pernoctar en los hoteles. Según ha constatado el Gremio de Hosteleria, los visitantes han sido, sobre todo, vecinos de Barcelona y municipios próximos, y extranjeros que estaban alojados en la capital catalana y han hecho una escapada de un día a Sitges. "El Viernes Santo todo el mundo batió récords", ha remarcado, en referencia a los restaurantes.

Aparte del turista español y catalán, un año más en Sitges ha predominado el turista francés, que en buena parte ayudará a mantener una ocupación elevada durante los próximos días. Dado que los ciudadanos franceses disfrutan de un calendario de vacaciones de Pascua parcialmente diferente al de los catalanes, el gremio ha apuntado que durante esta próxima semana los hoteles registrarán una ocupación elevada, que se aproximará al 80% en el caso de los establecimientos del núcleo urbano.

El Maresme, clave

El presidente del Gremio de Hostelería del Maresme, Jordi Noguera, ha afirmado que, con datos todavía provisionales, se han cumplido las previsiones que apuntaban a una ocupación por término medio de casi el 88% y de hasta el 92% entre el Viernes Santo y Sábado de Pascua si la meteorología acompañaba, cosa que ha sido así.

Noguera ha destacado las reservas de última temprano de los "indecisos" de lugares próximos, que finalmente han reservado una noche de hotel, "máximo dos". Este factor ha hecho que se haya incrementado el movimiento, especialmente durante el fin de semana.

En líneas generales, Noguera ha hecho una valoración más positiva que la de la Semana Santa del 2016 ya que ha destacado que este año esta ha llegado a mediados de abril –el anterior fue a finales de marzo- y eso "asegura más ocupación" y más establecimientos abiertos, buena parte de ellos "con la idea de continuar con el hotel abierto de cara a la temporada de verano".

Positivismo para el verano

De cara al verano, el presidente del Gremio se ha mostrado positivo ya que ha dicho que el sector está "bastante animado" y las reservas "van llegando". Ha puntualizado que todavía hay hoteles que están ultimando reformas y que abrirán a mediados de mayo, pero ha asegurado que la previsión de cara a la temporada turística de junio hasta agosto es "muy buena".

En los campings, las valoraciones también son positivas y se mantienen las buenas expectativas de cara al verano. El presidente de la Asociación de Campings de las comarcas de Barcelona, Francisco José Caballé, ha asegurado que la ocupación durante la Semana Santa ha sido de entre un 90 y un 100% en el caso de los bungalows y de un 70% en el caso de las parcelas.

Mayoritariamente los turistas han sido de proximidad, tanto de Catalunya como del resto del Estado español, pero también ha habido un incremento de extranjeros en comparación con el año pasado. Entre estos, la mayoría franceses, seguidos de alemanes, italianos y belgas.

Más movimiento

"Ha habido mucho más movimiento que el año pasado", ha declarado. Caballé explica esta circunstancia por el buen tiempo y porque la Semana Santa ha llegado más tarde en el calendario, coincidiendo con los gremios de hosteleria de Sitges y el Maresme. También coincide en prever una buena campaña de verano ya que las reservas son actualmente "superiores a las que había el año pasado en las mismas fechas".

Por otra parte, Caballé ha destacado que en el caso de los campings la ocupación de Semana Santa se alargará una semana más, como se constata en los hoteles de Sitges, ya que hay extranjeros -especialmente franceses-, que, al tener unas vacaciones diferentes a las de Catalunya, alargarán su estancia unos días.

Finalmente, en la ciudad de Barcelona, a falta de datos definitivos, el Gremio de Hoteleros da las expectativas de ocupación por cumplidas. De esta manera, se han superado los registros del año pasado. Si durante el 2016 los establecimientos de la ciudad llegaron al 80% de ocupación entre el Jueves Santo y Lunes de Pascua, esta Semana Santa se ha fregado el 85%. También se han alcanzado el 85% de plazas reservadas en el caso de los apartamentos turísticos, según datos facilitados por la patronal APARTUR.