La cara visible del grupo Elite Taxi, Alberto Tito Álvarez, grupo que protagonizó la respuesta más violenta en la manifestación del viernes pasado en Barcelona, ha explicado en una entrevista en RAC1 que "es muy fácil condenar un acto de violencia sin saber la realidad de la situación". A pesar de condenar de forma leve los actos violentos de algunos radicales en la plaza de Sant Jaume o el coche de la aplicación Cabify que volcaron en una céntrica calle de Barcelona, ha apelado al patriotismo y ha explicado que el sector contribuye con más de 400 millones de euros en impuestos, hecho que ayuda a mantener el estado del bienestar: "Cada vez que coges un Uber o Cabify contribuyes a los recortes en sanidad y educación".

Sobre los episodios de violencia, la aplicación Cabify ha enviado un comunicado donde condena estos actos y anima a los representantes de este sector, como Álvarez, a condenarlos firmemente y colaborar en la identificación de los agresores. Sobre la acusación que hace Álvarez diciendo que algunos taxis han recibido pedradas en los cristales y, afirma, "seguro que han sido conductores de Cabify", la compañía tecnológica alerta de los actos intimidatorios y recuerda que eso sólo genera todavía más violencia.

El sector VTC vs. sector del taxi

Tito Álvarez ha tenido palabras para el gobierno del Partido Popular, al que acusa de una liberalización del sector encubierta. También los acusa de equiparar el sector VTC, los vehículos de arrendamiento con conductor, con el del taxi. Si antes sólo podía haber un coche de VTC por cada 30 taxis, ahora la proporción se está igualando. Eso, según él mismo, lo está permitiendo el gobierno popular y "no tiene sentido que la administración gestione dos servicios que compiten entre ellos". Apps como Uber o Cabify operan bajo esta regulación y se dedican a "expoliar y llevarse el dinero a paraísos fiscales", según indica Álvarez. Cabify se defiende diciendo que los ingresos generados en el estado español los paga en el país a través de su filial española.

Mientras el taxi está muy regulado, Álvarez acusa que los otros sectores no lo están en la misma medida. "Es muy difícil competir cuando estás tan regulado", explica el representante de Elite Taxi. Así y todo, admite que esta regulación es también una garantía para el usuario.

"Los conductores de Uber duermen toda la noche por la calle" y, por lo tanto, "la calidad del servicio no es buena", ha afirmado. En este sentido, también ha explicado que ningún representante de estas aplicaciones se ha querido sentar a hablar con ellos.

El sector, en estos momentos, se encuentra en un momento de cierto colapso. El número de licencias ya está cubierto en toda la ciudad y comprar una cuesta 150.000 euros. Por otra parte, los conductores que trabajan en una flota de taxis pagan un alto porcentaje de los ingresos a la empresa por la que trabajan. Por su parte, Cabify se congratula de haber creado hasta 10.000 puestos de trabajo, cifra que en dos años podría ascender a los 20.000 o 30.000 debido a la ampliación de licencias.