Los laboratorios Hipra esperan comercializar a partir del próximo mes de junio la primera vacuna catalana contra el coronavirus. Están a la espera, pues, de acabar la última fase del estudio, presentar la documentación necesaria y recibir la documentación de la Agencia Europea del Medicamento. El director de la división de Salud Humana de la compañía, Carles Fàbrega, ha adelantado a la agencia EFE que la previsión es remitir toda la información de la primera vacuna catalana al EMA en abril; para recibir respuesta en mayo o al principio de junio, por lo cual se agotaría el plazo de comercialización del segundo trimestre que dio en enero la ministra de Ciencia, Diana Morant. Una vez que llegue la luz verde de Europa, Hipra entrará en la fase de elaboración industrial de la vacuna, lo cual se prolongaría únicamente una pizca más de dos semanas, después de meses de preparación del antígeno.

La investigación en los laboratorios de Amer (Selva) se encuentra actualmente en la tercera fase, la última antes de presentar la documentación, que evalúa la "seguridad y tolerabilidad", según Carles Fàbrega, de la vacuna como recuerdo de cualquiera de las autorizadas hasta el momento. Aquí se trabaja con unos 3.000 voluntarios y ya se ha completado la labor realizada en diferentes hospitales de España con unos 2.500, mientras que, en Portugal e Italia, donde también colaboran con la investigación, no han acabado todavía de suministrar sus dosis. Fàbrega ha subrayado que los resultados de momento van "bien" y que el resumen de los datos que se van obteniendo es "muy positivo". De hecho, en la fase clínica IIb, la dosis de refuerzo de Hipra genera una respuesta más potente enfrente de variantes que una vacuna de mRNA, como es el caso de la de Pfizer.

Los datos dejan "tranquilos" a los expertos españoles "con respecto a seguridad y eficacia", con unos números que demuestran la superioridad de su vacuna; según apunta Efe. Así, entre las personas que recibieron Pfizer como refuerzo, la cantidad de anticuerpos neutralizadores contra la covid se multiplicó por 67 al cabo de catorce días de su inyección, mientras que lo hizo para 147 en el caso de la dosis de Hipra. El director de la división de Salud Humana de estos laboratorios destaca además que una de las características de su vacuna es "su versatilidad y su amplio espectro de protección", con una superioridad evidente en estudios previos cuando se compara con Pfizer enfrente de las variantes Beta y Ómicron.

La vacuna española de Hipra está basada en dos proteínas recombinantes estructuralmente similares, una correspondiente a la variante alfa y otra a la variante beta, que se unen formando una estructura única llamada dímer y que está acompañada de un adyuvante que incrementa la respuesta inmunológica. Esta combinación es capaz de generar una respuesta enfrente de una de las proteínas del virus SARS-CoV-2, conocida como proteína S (de spike, denominada 'proteína espiga' en catalán).