Polémica por el nuevo anuncio de Pepsi, que ha acabado con una retirada de la publicidad y con una disculpa de la empresa. El nuevo contenido publicitario de esta marca de refrescos ha sido fuertemente criticado en los Estados Unidos al considerar que frivoliza con la lucha contra el racismo.

En él, se ve la modelo Kendall Jenner que deja una sesión de fotografías para sumarse a una manifestación que hay en la calle. Una vez en la protesta, Jenner coge una lata de Pepi y acaba ofreciéndola al agente.

La imagen final del anuncio recuerda en la famosa imagen de de la manifestante Iesha Evans, que fue detenida en una manifestación por acercarse a la barrera policial. Una imágenes que ha ocurrido símbolo de la lucha contra la violencia racial en los Estados Unidos.

Justamente esta comparación ha sido la que ha provocado el alud de críticas, ya que muchos consideran que es frivolizar con la lucha contra el racismo y las minorías de la organización Lives Matter, un movimiento que surgió después de la muerte de jóvenes negros en manos de policías blancos.

Pepsi ya ha salido al paso de la polémica, retirando el anuncio y pidiendo disculpas. Según la empresa, su objetivo era proyectar una imágenes "global de unidad, paz y entendida" y que en ningún caso "era quitarle importancia a ningún problema serio". Unos objetivos que "claramente" no se han cumplido, por lo que han pedido disculpas y han asegurado que eliminarán el contenido y frenarán otros lanzamientos.