Después de que el músico Quimi Portet denunciara que un camarero de la empresa Baleària no le quiso atender por hablar catalán, la organización Plataforma per la Llengua ha decidido tomar partido en el asunto. En una carta enviada a los dirigentes de la empresa, la plataforma lamenta la situación de "crisis" y "de escarnio público" que han vivido como empresa y les recomienda que "garantizar un trato de calidad hacia el consumidor catalanohablante evitaría esta exposición negativa y mejoraría la satisfacción de vuestros clientes". 

Por eso, les proponen ayudarlos a través de un "taller de gestión lingüística que permitiría mejorar la calidad en la atención al cliente". La Plataforma asegura que "desde hace años ofrecemos talleres para empresas y administraciones orientados a una buena gestión del multilingüismo en el equipo humano que trabaja" y hacen un trabajo "asertivo, con detección de problemas, propuestas en positivo, orientación a los resultados y revisión de objetivos".

La carta, que también lamenta que el caso de Portet no sea un caso aislado ya que se han registrado otros, les propone colaborar juntos para hacer frente. La Plataforma, además, analiza el problema de la empresa transportista y asegura que "gran parte de los trabajadores del mar son personas que pasan mucho tiempo fuera de sus hogares y que a menudo provienen de fuera de los territorios de habla catalana". La organización acaba la carta asegurando que queda a la disposición de lo que crean oportuno.