La Universitat Ramon Llull y la Universitat Internacional de Catalunya (UIC) cederán espacios para acoger las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU), que empiezan el próximo martes. Se trata de espacios en Barcelona, y Sant Cugat del Vallès en el caso de la UIC, y a donde irán alumnos del área metropolitana de Barcelona. El secretario general del Consejo Interuniversitario de Catalunya (CIC), Josep Ribas, ha explicado a la ACN que el objetivo es mantener la descentralización de los tribunales y reducir la movilidad de los estudiantes en el contexto de pandemia. Estas se suman a las universidades públicas y se mantendrán también institutos de secundaria, pero menos que el año pasado. Con todo, las medidas de prevención serán muy similares a las del 2020.

Las PAZ se celebrarán del 8 al 11 de junio y acogerán a unos 40.000 estudiantes. Ribas ha explicado que se han adaptado "todas las condiciones de seguridad y protección necesarias" para garantizar la seguridad contra la Covid tanto de estas estudiantes como de los 5.000 miembros implicados en la realización de los exámenes.

Así, se mantendrá la obligatoriedad de la mascarilla, las entradas escalonadas y diferenciadas, la ventilación en las aulas y la distancia personal. Esta última pero tendrá un pequeño relajamiento y se pasará de los 2,5 metros entre personas a los dos metros, hecho que permitirá que algún aula acoja a algún estudiante más.

Otro de los aspectos que se mantiene es la descentralización de las sedes para hacer el examen. El año pasado se triplicaron los municipios de Catalunya que acogían tribunales y este año se mantendrá esta medida. La finalidad es la misma: "Evitar la movilidad de los estudiantes y distribuirlos", ha indicado Ribas.

Estas sedes estarán como siempre en universidades públicas y, como el año pasado, en institutos. El secretario general del CIC ha agradecido el esfuerzo en los centros de secundaria ya que este año la selectividad recupera su calendario habitual, a principios de junio, y coincide por lo tanto con la actividad académica en los centros. Eso pero ha hecho que sean menos los institutos que pueden facilitar espacios para acoger las PAU y es aquí donde se ha pedido el apoyo de las universidades privadas.

Ribas ha explicado que finalmente la UIC y la URL han cedido "muy amablemente" parte de sus espacios para acoger tribunales de las PAU. Ha añadido que es la primera vez que se utilizan instalaciones de universidades privadas para hacer los exámenes y ha asegurado que se garantizarán las mismas medidas en todas las sedes. "Tenemos todas las esperanzas para que las pruebas se puedan hacer con todas las medidas necesarias para evitar contagios por la Covid", afirma.

Comunicar rápido los confinamientos

A nivel organizativo, ha pedido también a los estudiantes que den positivo o que se tengan que confinar por ser contacto estrecho que lo comuniquen tan pronto como tengan conocimiento. De esta manera se evaluará el caso y se dará la solución para que los alumnos puedan hacer el examen en otro momento. En todo caso, Ribas ha asegurado que se buscará la solución más adecuada y estos estudiantes tendrán los mismos derechos que el resto de la convocatoria ordinaria.

Desde el punto de vista académico, los exámenes mantendrán también la mayor optatividad a la hora de responder las preguntas, como se hizo el año pasado. Y es que Ribas ha recordado que los alumnos que se examinarán la semana que viene han vivido los dos cursos en pandemia y han tenido la modalidad híbrida durante buena parte del curso. Por eso, se mantiene que el estudiante pueda escoger de entre una mayor optatividad de textos y problemas "aquellos que se adecuan mejor a la formación recibida".

 

Foto principal: La Universidad Blanquerna de Ramon Llull / Wikimedia Commons - Zarateman