A los Mossos no les consta ningún incidente con la fiscal jefe de Barcelona, Anna Maria Magaldi, ni ningún requerimiento de ella para que la acompañaran hasta el coche ante los presuntos insultos y el acoso que habría recibido el viernes cuando salió del juicio a Artur Mas, Joana Ortega e Irene Rigau.

"No se ha registrado ningún incidente de este tipo ni ninguna denuncia al respecto" dice la oficina del portavoz de los Mossos d'Esquadra.

La Fiscalía General del Estado ha expresado hoy su solidaridad y apoyo a los fiscales de Catalunya y especialmente a la fiscal jefe provincial de Barcelona, Anna Maria Magaldi, y ha lamentado "el acoso y los insultos" que habría recibido con ocasión del juicio al expresidente de la Generalitat Artur Mas. Fue el viernes al mediodía, en la pausa que se hizo a la hora de comer, que la fiscal jefe de Barcelona salió por la puerta principal mientras se oían algunos gritos contra el sistema judicial: "Fora, fora, fora la Justícia espanyola". Y un par de gritos de "facha". Mientras, Magaldi encendía un cigarrillo y se marchaba.

Según los testigos presenciales de los hechos y el mismo joven que habló directamente después con Anna Maria Magaldi, la fiscal jefe de Barcelona llamó a un mosso en el momento en que Lucas Senollosa se acercó y le dijo: "Disculpe, ¿usted cree que es lógico sentar a un presidente en el banquillo de los acusados por poner urnas de cartón?". El mosso no lo identificó y lo hizo volver con el resto del grupo que daba apoyo a Mas, Ortega y Rigau detrás de las vallas que instaladas delante de la puerta del TSJC. Pero no lo registró como incidente. Tampoco consta que Magaldi denunciara insultos ni ningún tipo de acoso.

Los testigos que vieron los hechos no detectaron ningún momento de tensión y aunque los mossos que había en las puertas del Palau de Justícia estaban pendientes de los hechos, al final ni se los requirió ni tuvieron que actuar.