La Abadía de Montserrat ha aclarado que enviaron el texto del Papa en castellano por orden del Vaticano, según declaraciones de fuentes del monasterio a ElNacional.cat. La explicación llega después de que el cardenal Joan Josep Omella se haya defendido este martes y haya indicado que el texto que leyó el pontífice fue preparado por los monjes de Montserrat. "Esto no pasa por el arzobispado", ha añadido. Todo, a raíz de la polémica desatada por la sorpresa del papa Francisco cuando bendijo la Moreneta de Girona en español. "¿No tiene que ser en catalán?", preguntó a Omella, que respondió que "no".

Después de las palabras de Omella, fuentes de monasterio han señalado a este medio que "el texto de la bendición de la imagen de la Virgen que fue presentado al Santo Padre fue preparado por la Abadía Montserrat en lengua castellana de acuerdo con las indicaciones que se habían recibido desde la Casa Pontificia, entidad de la Santa Sede encargada de organizar la audiencia". Es decir, que fue el Vaticano quien pidió que el papa Francisco bendijera la Moreneta en castellano —durante la audiencia a los participantes en el peregrinaje a Roma de la cofradía de la Virgen de Montserrat, con motivo de los 800 años de su fundación.

Omella se defiende

En esta línea, el cardenal ha confesado que la polémica "lo ha dejado pasmado" y ha negado que el pontífice pidiera leer en catalán. "¡Al contrario! Si hubiera sido en catalán, además, habría tenido problemas para pronunciarlo", ha apuntado. Y ha añadido: "Cuando el Papa entra y va directo a hacer la bendición, me pregunta si es en catalán o en castellano. Yo miro y veo que el papel está en castellano, y se lo digo". Además, ha indicado que el texto no pasó por sus manos y que lo habían preparado "los monjes de Montserrat, que son los que envían los textos a la secretaría de Estado". "Y lo hicieron en castellano. Entiendo que porque el Papa no sabe hablar catalán", ha explicado. Concretamente, ha apuntado que el organizador fue el padre Joan Maria Mayol y que todos los detalles estaban preparados con mucha antelación.

Omella ha asegurado que fue gracias a él que el papa Francisco dijo "bon dia a tots" en catalán al inicio del acto. "Creo que eso a la gente le gustó", ha dicho. Por otra parte, se ha mostrado confundido: "No sé qué ha pasado aquí, qué movimiento se ha hecho en contra de mi persona o de la lengua". Y ha negado tener nada contra la lengua catalana. "Lo contrario, la quiero mucho. (...) Yo hablo mal el catalán porque soy de la Franja, pero tengo un gran afecto a la lengua. Fue la primera que aprendí y con toda la familia la hemos hablado siempre", ha concluido.