A cinco días para la declaración de los máximos responsables del espolio del Palau de la Música y con el caso ya inmerso en el juicio, las partes han empezado una partida de ajedrez en paralelo con la sombra de un posible pacto. Primero fue Jordi Montull. Un hipotético acuerdo entre todas las partes que haría que implicaran a CDC a cambio de rebajar la pena de Gemma Montull. Ayer, el acuerdo ya se empezaba a matizar y se hablaba de que sólo afectaría al ex tesorero Daniel Osàcar. La Fiscalía parece que no tiene ninguna intención de cambiar ahora los planes y de modificar unas calificaciones que piden 27 años para Gemma Montull, para su padre y para Fèlix Millet, que parece haber también entrado al juego.

Algunas informaciones apuntan que habría hecho una aproximación con la Fiscalía para rebajar también su pena. Pero otras fuentes judiciales lo niegan. También ponen muy en cuestión que el fiscal Emílio Sánchez Ulled reciba de agrado una propuesta del abogado de Millet en vísperas de la declaración, para rebajar los años que se le piden. De momento, en su primera intervención en el juicio se ha opuesto a la petición de la defensa de Osàcar, que pedía retirar un caso por prescripción. Sánchez Ulled destapó el caso a partir de los anónimos a Hacienda, el juicio ha tardado casi 9 años en llegar, y nadie da por hecho ni el pacto con Millet ni la predisposición del fiscal por negociar con el principal acusado del caso Palau, para quien pide 27 años de prisión.

Nada cerrado

Mientras se apunta este posible pacto, el acuerdo de los Montull va perdiendo comba. La confesión parece que la haría la hija, y que sólo afectaría a Osàcar. El ex tesorero y su abogado han estado tranquilos estos días de cuestiones previas en la Ciutat de la Justícia, mientras los abogados del Montull, a pesar de no querer entrar en los detalles del acuerdo, sí que han verbalizado que quieren que el acuerdo sea lo más amplio posible con todas las partes.

Algunas partes sin embargo, comentan a El Nacional que con ellos no ha hablado nadie. "No estamos negociando", afirman. "Ni nos lo han propuesto ni hubiéramos aceptado", remarcan. Las mismas fuentes afirman tener la seguridad que "cualquier intento de aproximación" de los abogados de Millet y Montull a la Fiscalía acabará con la negativa del Ministerio Público.

La hipotética negociación y su desenlace no quedará aclarado hasta el 8 de marzo, que es cuando tienen que declarar los principales actores del pacto: Jordi Montull, Gemma Montull, y ahora también, según algunas fuentes, Fèlix Millet.

Fuentes próximas al caso también ponen de relieve que si realmente se estuviera trabajando en el acuerdo, el día 1, cuando empezaron las cuestiones previas, ya hubiera tenido que haber una modificación de las calificaciones de las penas que se piden, aunque formalmente es un trámite que se acostumbra a hacer en los informes finales. Pero si se hubiera cerrado un pacto, o la negociación estuviera viva, ya hubiera habido una señal.

La única señal que habido hasta ahora ha sido la voluntad de Gemma Montull de rebajar su pena de prisión sacándose de encima 3 millones de euros que le atribuyen haberse quedado. En las cuestiones previas aportó una hoja de excel que avanzó El Nacional, detallando cómo se había gastado este dinero Fèlix Millet.

La Fiscalía no quiere dar detalles ni confirmar si se está negociando o no. "La semana que viene se verá qué pasa", dicen fuentes del Ministerio Público y recuerdan que el juicio ya está en marcha y que no es momento de hablar de según qué extremos a estas alturas.

Por otra parte, para obtener los atenuantes de la confesión, hace falta que el acusado confiese por voluntad propia. Lo mismo en el caso de reparación del daño. No hay que llegar a un pacto para aplicar esta dispensa que haría rebajar los años de estancia en prisión. Por lo tanto, en este sentido el pacto todavía está más descafeinado.

A lo que sí dan credibilidad algunas fuentes próximas al caso, es que en medio de las habladurías sobre el pacto de los Montull, el abogado de Fèlix Millet haya querido mover ficha. "Sería razonable comentar la jugada con la Fiscalía", dijo, para mirar de conseguir una reducción de la demanda de la pena de prisión.

Osàcar, tranquilo

Mientras tanto Daniel Osàcar y su abogado Xavier Melero no han estado especialmente nerviosos en los dos días que han estado realizando las cuestiones previas del juicio. Ni en la sala, ni en los pasillos, donde Daniel Osàcar se despedía tranquilamente de otro de los acusados: "Nos vemos la semana que viene".

Lo que sí que ha hecho Melero ha sido retirar del juicio a todos los testigos con perfil político. El primer día renunció a 34 testigos todos ellos vinculados al departament de Política Territorial i Obres Públiques, y muchos ellos ex altos cargos de CiU, a quien el abogado de Daniel Osàcar ha retirado del foco judicial.