La Indicación Geográfica Protegida (IGP) Manzana de Girona está recopilando información sobre el alcance de los daños causados por el temporal y, sobre todo, por el desbordamiento del río Ter más abajo de Foixà. Los fructicultores empiezan a comprobar las consecuencias del temporal Gloria en los campos del Baix Empordà. El Ter se desbordó a la altura de Foixà y arrasó hectáreas de los campos más próximos al río, sobre todo en la zona de Verges, Ultramort, Ullà o Torroella de Montgrí. "Los campos se inundan habitualmente pero nunca nos hubiéramos imaginado que el río cambiaría su curso y nos pasaría por el medio de nuestros campos", ha explicado Joan Maria Pareta, fructicultor de Giropoma Costa Brava y miembro de Unió de Pagesos.

En este punto donde el Ter se desbordó, hay un campo experimental con las variedad más innovadoras de Giropoma Costa Brava. Aquí, las estructuras y las redes antigranizo han resistido el embate del agua pero también habrá que revisar, a lo largo de todo el recorrido, las canalizaciones de reg. "Nosotros nos esforzaremos al máximo para recuperarnos, pero las administraciones y la aseguradora también se tienen que poner las pilas", subraya Pareta. "Todo el mundo, quién más quién menos, tiene algún trozo de campo que se le ha llevado la riada, con algún manzano que ha quedado arrancado, tendremos que rehacer los campos", ha afirmado el fructicultor que ya adelanta que la valoración de la IGP revelará que hay "daños mayores" porque hay afectaciones "muy graves.

Pareta, como miembro de UP, también afirma que ha sido una inundación diferente a las que habían vivido hasta ahora, porque el río bajaba con mucha fuerza, y lo atribuyeael desembalse de agua de Susqueda que el jueves por la noche hizo llegar muchos metros cúbicos por segundo de agua en el Baix Ter. "El río se ha desbordado con una furia y un empuje que no es normal, que den explicaciones y que expliquen por qué lo hicieron así", ha pedido el fructicultor a la Agencia Catalana del Agua y a la Generalitat.