Las ONG ambientales están "insatisfechas" con los resultados obtenidos después de dos semanas de negociaciones a la XXVI Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Cambio Climático de la ONU (COP26) que se ha acabado a las 00.28 horas en Glasgow (Reino Unido) y valoran los resultados negativamente. "Faltos de ambición", "sumisos" o de sensación de "descontento general" son algunas de las opiniones que reflexen el desánimo generalizado.

Para Amigos de la Tierra, la falta de justicia climática de la cumbre de Glasgow "aleja el hito de limitar el incremento de las temperaturas global a 1.5ºC" y "perjudica todavía más los países del sur global". Además, acusa a los países más contaminantes de "presionar para impedir avanzar en la eliminación de los combustibles fósiles para abrir la puerta en las falsas soluciones".

"Probablemente, la Cumbre más excluyendo de la historia, después de un inicio marcado por las grandes declaraciones al margen de las negociaciones y consideradas por muchos como 'promesas vacías', los continuos bloqueos de los países más contaminantes durante las dos semanas de negociaciones, han provocado que la COP26 suponga un retroceso para la lucha climática", declara la responsable de Justicia Climática de Amigos de la Tierra, Cristina Alonso.

Por otra parte, Ecologistas en Acción lamenta que Glasgow deje atrás millones de personas afectadas por el climático mientras el acuerdo final de la COP26 "prorroga el improrrogable" y los acuerdos finales posponen "todas" las medidas necesarias. Al mismo tiempo, critica que una "inmensa mayoría" de países expresa su descontento con el texto final porque no responde a las expectativas de la ambición deseada, pero ha decidido firmarlo para poder seguir manteniendo "viva" la llama del trabajo conjunto contra la lucha climática.

Para la organización, el acuerdo "estanca" la lucha climática y no da respuesta a las consecuencias del calentamiento global que ya sufren millones de personas a todo el planeta. "Se ha aprobado un texto que deja insatisfecha una inmensa mayoría de países pero que, sin embargo, ha sido firmado detrás del consenso y de poder seguir trabajando de manera conjunta contra el calentamiento global", lamenta Ecologistas en Acción en su valoración final de la COP26.

Mientras tanto, Greenpeace, califica el acuerdo de "sumiso y débil" y con un objetivo de mantener el incremento de temperatura global a final de siglo en 1,5 ºC casi no vive pero celebra que envía una "señal que la era del carbón" está acabando".

"El Bla Bla Bla de la COP26 también lo vemos en el Gobierno, las buenas palabras no nos salvarán de la crisis climática, necesitamos acción, medidas urgentes para transformar rápido los sectores responsables del cambio climático y abandonar los combustibles fósiles de forma planificada pero rápida. Se nos acaba el tiempo", ha manifestado la responsable de la Campaña de Cambio climático de Greenpeace Espanya, Tatiana Nuño.