Unos 200 países han llegado finalmente a un acuerdo de mínimos por la emergencia climática. Después de unas largas jornadas de negociaciones y a pesar de las reticencias de países como la India, la vigesimosexta Conferencia de las Naciones Unidas sobre el cambio climático ha producido un texto "histórico", que, en el marco del Acuerdo de París, por primera vez incluye referencias a los combustibles fósiles. El presidente de la cumbre, el británico Alok Sharma, ha felicitado entre lágrimas en todos los representados presentes en Glasgow. Así y todo, no todo el mundo se ha mostrado convencido de que el texto acordado sea suficiente para hacer frente al inminente colapso ambiental y que los signatarios lleven a cabo las promesas hechas en el transcurso de la cumbre, como es el caso de la mayoría de activistas por el medio ambiente.

Cinco puntos

El histórico acuerdo de Glasgow se sostiene en cinco puntos principales: 1) acelerar la transición energética; 2) reducir en un 45% las emisiones del 2010 para el 2030; 3) doblarse en financiación para países menos desarrollados económicamente para la transición climática; 4) eliminar progresivamente el uso del carbón; 5) retirar las subvenciones a los combustibles fósiles. La cumbre, que hacía horas que se encontraba atascada en el lenguaje específico del acuerdo, ha estado muy cerca de marcharse de Glasgow sin un consenso unánime. En el momento álgido de desesperación, el presidente Sharma ha tenido que suplicar en la sala: "Por Dios, no matéis este momento pidiendo más texto, texto diferente, borrándolo y borrándolo", ha pedido, y ha instado los representados a "actuar con la urgencia que es esencial para nuestra supervivencia. Por favor, abrazad este texto para que podamos traer esperanza a los corazones de nuestros hijos y nietos."

Acuerdo débil

Uno de los motivos por los cuales el acuerdo no ha llegado hasta el último momento ha sido el inmovilismo de la India con respecto a reducir el uso del carbón como fuente de energía. Parecía que la cumbre iba bien encaminada hacia un acuerdo, pero de manera inesperada, la delegación india ha introducido un cambio en el texto en el cual alejan la fecha límite para cesar el uso del carbón. Concretamente, el texto solo compromete los países a "la reducción progresiva" en cuentas de la "eliminación progresiva" de esta fuente de energía tan contaminante. Ante las demandas del presidente de la cumbre, el resto de países han cedido, a pesar de con muchas reticencias, y han firmado la enmienda. Para muchos expertos y comentaristas, eso denota que el acuerdo está sentenciado desde el inicio, ya que las delegaciones han antepuesto la continuidad de las negociaciones y la buena imagen de la cumbre antes que adoptar medidas efectivas contra la emergencia climática.

El acuerdo de hoy pretende mantener vivo el objetivo de limitar el calentamiento global a un máximo de 1,5 grados para el año 2100 con respecto a los niveles preindustriales. Por primera vez, la comunidad internacional ha reconocido la necesidad de acabar con los combustibles fósiles. Pero eso no convence a la gran mayoría de activistas y científicos por el cambio climático, de que todavía exigen más acciones concretas. Por su parte, la organización Global Justice Now, ha comentado que aunque "sí que ha habido un paso adelante" en esta cumbre, pero que su "única esperanza es seguir luchando" para conseguir ir más allá. Entre otras demandas, la organización ha lamentado que el acuerdo llegue "20 años demasiado tarde" y que no se haya discutido prohibir la extracción de combustibles fósiles, las responsabilidades de los "criminales del clima" o el futuro del capitalismo como modelo económico.

 

Foto principal: el presidente de la COP26, Alok Sharma / Europa Press