La justicia sueca ha anunciado hoy que archiva la causa por delito sexual contra Julian Assange, el fundador de Wikileaks. Assange llevaba casi cinco años refugiado en la embajada en Londres de Ecuador, país que le había concedido asilo político. Se cree que en las próximas horas Assange podría salir de su confinamiento, que estaba afectando gravemente a su salud.

La complicada historia de Assange

Assange estaba reclamado por la justicia sueca por un delito sexual. Él asegura que era un montaje. El gobierno de Ecuador le dio asilo político, no por el caso sueco, sino porque consideraba que si era enviado a Suecia, de allí se le podría enviar a los Estados Unidos, donde correría el riesgo de ser sometido a un juicio injusto (podría ser juzgado por espionaje por un tribunal militar que podría llegar a pedir 35 años de prisión). El gobierno británico se negaba a dejar salir a Assange de la embajada para ir a Ecuador, y por eso este estaba bloqueado en la sede diplomática. En realidad, el Comité contra las Detenciones Arbitrarias de la ONU dictaminó en 2015 que la situación de Assange era ilegal y estableció que Suecia y Gran Bretaña le tenían que facilitar libertad de movimientos, pero no hubo ninguna reacción ni británica ni sueca. El último caso judicial pendiente de Assange tenía que prescribir en 2020 (hasta ahora tres acusaciones ya habían prescrito), y se temía que tuviera que pasar tres años más en la sede diplomática. Pese a todo, podría ser detenido por la policía británica por no haberse presentado ante los tribunales británicos cuando se le requirió.

Una acusación controvertida

En 2010, mientras estaba de vacaciones en Suecia, Julian Assange fue acusado por dos mujeres, una por acoso y la otra por violación. En un primer momento la justicia desestimó los casos, pero más tarde los reabrió y dictó una orden de detención internacional a la Interpol. Esta reapertura del caso coincidió, quizás no por casualidad, con la filtración por parte de Wikileaks de decenas de miles de documentos que implicaban al ejército de Estados Unidos con abusos a los derechos humanos, especialmente en el Oriente Próximo. Assange, que en aquel momento estaba en Inglaterra, fue detenido por la policía británica, que lo dejó en libertad condicional. El fundador de Wikileaks rompió la libertad condicional y se refugió en la embajada de Ecuador, donde pidió y obtuvo asilo político. Pero las autoridades británicas no le permitieron marcharse al país de refugio, y se ha visto obligado a quedarse encerrado en la embajada. La actitud de la Fiscalía sueca ha sido confusa, porque se ha negado a enviar ninguna comisión a Londres para interrogar a Assange.

El documental

Estos días en el DOCS Barcelona se presenta, justamente, el documental Garzón / Assange, el juez y el rebelde, una coproducción hispanoalemana dirigida por Clara López Rubio y Juan Pancorbo. Se trata de un documental grabado en Ecuador, Londres, España y Suecia que muestra la tarea de Baltasar Garzón como director de la defensa del líder de Wikileaks. El controvertido juez español ha dirigido durante los últimos años, de forma altruísta, los esfuerzos de Wikileaks para sacar a Assange de la embajada. En este documental, que simpatiza abiertamente con Assange, se puede comprobar el acoso al que está sometido el líder de Wikileaks, pero también se puede verificar el deterioro progresivo del líder de Wikileaks a lo largo de los cinco años que ha pasado en la embajada ecuatoriana.