El Departament de la Vicepresidència y de Polítiques Digitals i Territori iniciará la próxima semana los trabajos de desvío de servicios afectados en el marco de la conexión de las líneas Llobregat - Anoia y del Vallès de Ferrocarrils de la Generalitat (FGC), en Barcelona. Se prevé que estos trabajos duren un año y dos meses, y que se destine una inversión de 6,4 millones de euros. Se trata de una medida que, además, mejorará la calidad del transporte público barcelonés, ya que conectará la estación de Gracia con la estación de Plaça España. La línea que se alarga es la de Llobregat-Anoia. El Govern calcula que eso también favorecerá la conectividad ferroviaria del distrito de Gracia e incrementará la intermodalidad, ya que las nuevas estaciones facilitarán el intercambio con la L5, el tranvía –que ahora finaliza en la Plaza Francesc Macià sin conexión ferroviaria– y otras líneas de FGC. Estos días se desarrollan sesiones informativas con el vecindario y representantes municipales.

Además, los usuarios que viajan hasta Barcelona desde la línea Llobregat-Anoia, tendrán un mejor acceso al centro de la ciudad, ya que ahora tienen que hacer transbordo en metro (L1 o L3). Todo eso se hace porque la intención es que haya más usuarios que viajes sobre vías y no sobre ruedas; porque se quiere reducir en un 25% el uso del vehículo privado en el Àrea Metropolitana de Barcelona. Se prevé que la actuación beneficie a 70.000 personas usuarias diariamente, además de contribuir a la descarbonización de la movilidad catalana.

Los trabajos consisten en el desvío de varios servicios –red de agua, de saneamiento, telefonía, cable, gas y electricidad– que se ven afectados por la ejecución de las obras previstas para prolongar la línea desde Plaça Espanya hasta enlazar con la línea del Vallès d'FGC, a la estación de Gracia. Las reposiciones de servicios abarcan tres ámbitos: la Gran Vía de las Corts Catalanas entre la calle de Llançà y la calle de Vilamarí, donde se ubicará el pozo de ataque de la tuneladora que perforará el túnel; la futura estación de Hospital Clínic; y la nueva estación de Gracia. Entre principios de julio y principios de septiembre, se efectuará la campaña de calas en el terreno para la detección de los servicios existentes y afectados por las obras de la prolongación en estos tres ámbitos. A continuación, empezarán de forma progresiva las actuaciones propiamente de desvío de los servicios.

Se prevé que la inversión total en este proyecto sea de 430 millones de euros, y que la prolongación de esta línea constará de un túnel que se ejecutará mediante tuneladora. Esta obra comportará la construcción de cuatro kilómetros nuevos de túnel y de tres nuevas estaciones, así como la remodelación de los intercambiadores de Plaça España y Gracia.