La policía da por desmantelado el grupo criminal que operaba en La Jonquera y El Pertús y que está considerado como uno de los "puntos negros" de la distribución de artículos falsificados a nivel europeo. El operativo se llevó a cabo el 29 y 30 de noviembre y es lo más importante que se ha hecho hasta ahora a nivel estatal. Entre las cifras del macrooperativo destacan 71 detenciones, seis registros y 41 inspecciones en locales y naves. Además, la policía estatal ha descubierto hasta siete almacenes secretos detrás de paredes falsas dónde escondían la gran parte del material.

La policía destaca que no había ningún líder claro sino que se trataba de tres grupos perfectamente coordinados. Las tiendas continúan todavía precintadas por orden judicial. En la aduana de La Jonquera se acumulan hasta 6.500 cajas del material decomisado (valorado en 8 MEUR) que se destruirán. El grupo había conseguido blanquear más de 9 MEUR en tres años y su volumen de negocio ilícito llega a los 5 MEUR. La jueza ha bloqueado más de 150 cuentas bancarias.

Después de tres años de investigaciones, la policía estatal -en colaboración con la Agencia Tributaria, Europol, la aduana judicial francesa y la policía portuguesa- han desmantelado uno de los principales "puntos negros" de la distribución de material falsificado de Europa. El grupo criminal operaba desde comercios de La Jonquera y El Pertús donde también tenía almacenes para esconder gran parte de la mercancía.

Hasta ahora, todas las operaciones policiales no habían conseguido poner freno en venta de productos falsificados, que había ido en aumento en la zona en los últimos años. Así lo reconoce la inspectora jefe de la UDEV, Mònica Dopico, que asegura que dos días después de actuar se encontraban las tiendas abiertas otra vez y llenas de material como si nada hubiera pasado. Ahora, en cambio, la policía ha cambiado de estrategia y ha atacado el caso de las falsificaciones también por la banda del blanqueo de capitales.

El macrooperativo se hizo los días 29 y 30 de noviembre y ha acabado con 71 detenidos, de los cuales cuatro ingresaron en la prisión bajo fianza (uno está fuera después de abonar el dinero). Más de 400 agentes de diferentes cuerpos han trabajado en esta operación, la más compleja nunca hecha al Estado en contra de este tipo de delito. En total, se han hecho seis registros y 41 inspecciones en locales, naves y almacenes. De momento, todos los espacios comerciales están cerrados cautelarmente por orden de la magistrada del juzgado de instrucción 2 de Figueres y la policía pide que se mantengan precintados durante dos años.